D€spués d€ 2016
■ AdBLUE: Se trata de una marca registrada por la Asociación Alemana de la Industrial del Automóvil, y el producto en sí es una disolución de urea al 32,5% en agua desmineralizada. El AdBlue se inyecta en el escape y, mediante una reacción química producida por el calor del escape, se transforma en amoniaco, el cual llega a un catalizador de reducción selectiva (SCR), convirtiendo el óxido de nitrógeno (NOx) en nitrógeno (N2) y oxígeno (O2). En los coches diésel modernos, el AdBlue va almacenado en un depósito adicional de entre 12 y 17 litros, y dura entre 6.000 y 8.000 km en condiciones de uso normal. No es un producto caro -unos 0,70 euros cada litro si lo repostas en un surtidor de gasolinera, y entre 1,3 y 2 euros el litro si lo compras en una garrafa-. Pero ojo, porque si permites que el AdBlue almacenado en el depósito se agote, la centralita del vehículo impedirá que pongas en marcha el motor.
■ GESTIÓN DE LA EFICIENCIA TÉRMICA: Mejorar la gestión térmica de los motores diésel tiene un impacto directo en la reducción de emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx). Hay fabricantes que ya trabajan en este campo, como por ejemplo Bosch. Esta compañía está diseñando un sistema de escape que permite regular la temperatura de los gases, y en sus pruebas han logrado reducir las emisiones de NOx a tan sólo 13 mg/km, lo cual es catorce veces menos que el actual límite legal. ■ MICRO-HIBRIDACIÓN: Los vehículos con tecnología mild-hybrid, conocidos como micro-híbridos, emplean un sistema eléctrico de 48V para reducir las emisiones contaminantes en un 15% de de media. A diferencia de los híbridos, los micro-híbridos no disponen de un motor eléctrico capaz de impulsar al vehículo por sí solo. Se basan en un motor de combustión, ya sea gasolina o diésel, al que se acopla un generador eléctrico que actúa como motor de arranque y alternador, y que sirve para alimentar todos los sistemas eléctricos del vehículo, liberando al motor térmico de cualquier tarea que no sea la de impulsar el coche. Dicho generador va conectado al motor térmico mediante una correa, y en fases de aceleración es capaz de suministrar un pequeño extra de potencia y par. Asimismo, en deceleración, ese generador recarga la batería de 48V, que generalmente tiene una capacidad de entre 0,5 y 1 kWh. Los nuevos Audi A6, A7 y A8, el Mercedes Clase S o el Renault Scénic son ejemplos de modelos que ya disponen de versiones micro-híbridas de 48V. Por otro lado, también existe la micro-hibridación de 12V, y Suzuki es la marca que más la explota, ofreciéndola en el Swift, Ignis y Baleno.