Calcula bien el kilometraje
■ El único impuesto que se va a subir al diésel es, precisamente, el del carburante, que se pondrá al mismo precio que la gasolina. Por eso, para saber cuándo te saldrá rentable un diésel, tendrás que hacer lo siguiente:
1.- Fíjate en el precio del modelo que quieres en diésel y en gasolina y calcula la diferencia. Por ejemplo: Seat Ateca 1.0 TSI 115 Reference: 22.060 euros
Seat Ateca 1.6 TDI 115 Reference: 23.660 euros Diferencia: 1.600 euros
2.- Apunta el dato de consumo medio homologado y calcula la diferencia.
Ateca 1.0 TSI: 5,2 litros/100 km
Ateca 1.6 TDI: 4,5 litros/100 km
Diferencia: 0,7 litros/100 km
3.- Con ese dato, ya sabrás cuánto te ahorrarás cada
100 km, pues además debemos suponer que el precio de la gasolina y del diésel va a ver el mismo. Si, por ejemplo, lo calculamos a 1,30 €/litro, cada 100 km ahorrarías
0,91 euros (0,7 x 1,30= 0,91 €)
4.- Teniendo en cuenta la diferencia de precio del punto 1, sólo debes hacer una regla de tres para saber el coste teórico al que vas a amortizar la compra del coche:
1.600 x 100 (km)= 160.000. € Después, 160.000/0,91 €= 175.824 km
Por tanto, con ese precio, tardarías 175.824 km en amortizar el coche. Si vas a tener el automóvil 5 años, tendrías que recorrer unos 35.000 km/año para que te saliese rentable.
Eso sí, en la práctica deberás tener en cuenta dos cosas:
1.- Cuanto mayor sea el precio del carburante, antes amortizarás la compra del diésel.
2.- El consumo real en gasolina suele más alto que el real de un diésel. De hecho, según los objetivos datos de spritmonitor.de -web en la que los usuarios europeos publican los consumos reales de sus coches-, la diferencia real entre ambos es 0,93 litros/100 km, lo que hace que, en la práctica, el diésel nos salga rentable si recorremos unos 26.500 km anuales.