Conclusiones
■ No contrates un renting -y financia el coche- si tu idea es quedártelo durante más tiempo que un contrato de renting -de
media, cuatro años-. Así, podrás conservarlo todo el tiempo que quieras.
Si vas a financiar el vehículo, busca el préstamo fuera de las financieras de las marcas; seguramente te saldrá más barato. De media, el TAE que ofrecen ahora mismo los fabricantes ronda el 10%, mientras que en establecimientos financieros puedes encontrar ofertas con un TAE inferior: entre el 6 y el 9%.
Si la oferta de financiación de la marca lleva consigo un importante descuento en el precio del coche -por ej., en Hyundai y para el Tucson que sacamos en este reportaje, alcanza 5.500 euros-, otra opción que debes calcular es financiar con el fabricante el importe mínimo que te soliciten -la cantidad es variable según marca y modelo, pero el periodo mínimo de financiación suele ser de 36 meses-. Si no tienes el dinero para dar como entrada el resto del precio de compra del vehículo, solicita una segunda financiación por el valor del importe que te falte… en una entidad bancaria y a menor interés.
■ Contrata un renting si no quieres mantener el vehículo más de cinco años...
Ya que los contratos de RAP a particulares suelen tener una duración máxima de ese periodo. A cambio de una cuota mensual, te olvidarás de los gastos añadidos del vehículo -impuestos, revisiones, seguro…- y la marca/compañía de renting te solucionará cualquier problema o avería. Tampoco deberás preocuparte de vender el coche una vez haya finalizado el contrato; sólo de disfrutarlo.