Duelo de titanes

Entre los SUV grandes Premium también se renueva la batalla. El Mercedes GLE se rearma hasta convertirse en un modelo temible para sus rivales, entre ellos, el BMW X5. No en vano, y aunque habrá más nuevas propuestas que irán apareciendo a lo largo de 2019 —incluso un híbrido enchufable con 80 km de alcance eléctrico—, una de las estrellas de la gama será la versión GLE 450 4Matic con la que se utiliza una microhibridación de 48 voltios. Aportará 22 CV a los 367 del motor de seis cilindros en línea, entregados a través de la 9G-Tronic y, por supuesto, llevados al suelo por un sistema de cuatro ruedas motrices universal en esta gama. Si en el BMW hacen aparición la dirección activa integral, el sistema de estabilización del balanceo o la suspensión adaptativa, el chasis del GLE tendrá, como novedad, una suspensión neumática de nuevo desarrollo. En BMW la gama de lanzamiento se conforma, en principio, en torno a tres motores de seis cilindros y caja Steptronic/8. Con 265 y 400 CV, según tenga uno o cuatro turbos el 3.0 Diesel, y 340 CV en el xDrive40i de gasolina. Con su remodelación, la longitud del GLE se aproximará más a los 5 m. Uno y otro podrán contar con un amplio espacio para siete asientos o cinco con un maletero de 645 litros en el BMW y 825 en el Mercedes; éste dispondrá, como elemento inédito en el segmento, de regulaciones eléctrica también en los asientos traseros.