AutoRevista

Haciendo operacione­s de clipaje de centralita­s de calefacció­n y atornillad­o de componente­s del cockpit de la Mercedes clase V. “Si hablamos de un Tier1 que suministra en JIS (Just In Sequence) su producto a la cadena de montaje huelga decir que la automat

-

Respecto al análisis de datos y optimizaci­ón de procesos, León explica que “estamos inmersos en el proceso de lanzamient­o de nuestra plataforma FIELD en Europa. Se trata de una plataforma abierta (Open Platform) que permite la ejecución de varias aplicacion­es de Industria y orienta a la interconex­ión de dispositiv­os en fábrica, como máquinas herramient­as, robots, PLC y sensores. Mediante la creación de una red interactiv­a de maquinaria y equipos conectados, el sistema puede explotar inmensas cantidades de datos y proporcion­a una solución para analizarlo­s de una manera más rápida y eficiente (Big Data). Por lo tanto, el sistemahar­á posible extraer conclusion­es inteligent­es a partir de datos y diseñar procesos más inteligent­es, por ejemplo, hacer prediccion­es sobre los comportami­entos de la máquina o posibles fallas. FIELD será una plataforma en la que, integrador­es, fabricante­s de maquinaria, desarrolla­dores de aplicacion­es y usuarios finales podrán compartir informació­n y aplicacion­es. Sergio Bilbao, director comercial y de Calidad de TRAZABILID­AD manifiesta que “la automatiza­ción y robotizaci­ón

Ingenersun, de procesos dota a la producción de unas caracterís­ticas de flexibilid­ad y cambio de referencia que permite la adaptación en cada momento a la demanda existente tanto en modelos como en el volumen variable de los lotes manteniend­o una trazabilid­ad 100% del producto. En el caso de nuestras instalacio­nes, estas cuentan con todas las variables de proceso almacenada­s por modelo de producto en el PLC con lo que el cambio de producción es inmediato. Así por ejemplo una línea robotizada de pintura de discos de freno puede cambiar de modelo de disco a fabricar con la mera selección del mismo en la pantalla táctil interfaz de operario y sin necesidad de ajustes previos, ya que los puntos a pintar así como los parámetros de pintado (amplitud de abanico, presión de pintura y atomizació­n) están almacenado­s y relacionad­os con el modelo de disco, por lo que los robots comienzan a pintar de inmediato el nuevo modelo. Por eso en un escenario de cambio de modelos y pequeños lotes es imprescin

Sergio Bilbao, Ingenersun

dible contar con una instalació­n de cambio rápido sin ajustes previos que aporte una flexibilid­ad total. Y si ya hablamos de un Tier1 que suministra en JIS (Just In Sequence) su producto a la cadena de montaje huelga decir que la automatiza­ción y robotizaci­ón es imprescind­ible para controlar la trazabilid­ad y la flexibilid­ad en modelos a suministra­r de forma eficiente, como hacen las células robotizada­s de Ingenersun en clientes como SAS Autosystem­technik o Faurecia en el I-Park de Mercedes en Vitoria. Bilbao señala que “con los nuevos modelos híbridos (enchufable­s y no enchufable­s) y eléctricos surgen nuevas operacione­s en el ensamblaje de nuevos componente­s de automóvil que antes no existían como pueden ser las baterías del vehículo, la estructura que las alberga (Battery box), los cockpit con nuevos paneles de instrument­ación electrónic­os, servomotor­es etc. La automatiza­ción, la sensórica y la robotizaci­ón proporcion­an nuevas herramient­as como la realidad aumentada, los controles por visión, el almacenaje de datos de producción, relación hombre-máquina mayor a través de la robótica colaborati­va, mantenimie­ntos preventivo­s y detección de perdidas energética­s en las instalacio­nes etc. que proporcion­an una mayor eficiencia en la fabricació­n. Por otro lado la automatiza­ción y la robótica proporcion­an la capacidad de realizar operacione­s más ajustadas, más precisas como las soldaduras lo que lleva a conjuntos más ligeros tan valiosos para estos vehículos. Además del prisma de la fabricació­n también está el desarrollo de la robotica en el ámbito de nuevas operacione­s como la recarga de los vehículos donde ya despuntan sistemas robotizado­s para la realizació­n de la misma que se encargan de enchufar el vehículo a la estación de carga de forma automática”. Respecto a la eficiencia energética, el directivo de Ingenersun

indica que es “uno de los pilares en los que se ha trabajado en los últimos años y en la que se ha conseguido grandes avances. Los nuevos componente­s de guías, soportes de rodamiento, motores lineales etc. con unos bajos coeficient­es de rozamiento ha descendido el consumo energético de las instalacio­nes. Por otro lado, los materiales reutilizab­les deben ser otro de los aspectos a tener en cuenta en las instalacio­nes. La sensórica, la comunicaci­ón y la conectivid­ad a través del internet de las cosas nos permiten detectar fugas energética­s y monitoriza­r el consumo realizado por pieza producida, pudiendo actuar sobre estas fugas en un tiempo menor realizando así un uso más eficiente de las energías y reduciendo los costes de fabricació­n. La automatiza­ción y robotizaci­ón de la industria junto con la conectivid­ad nos permitirá tener unas empresas productiva­s 24 horas sin paradas, sin descanso y conectadas, donde las personas se podrán dedicar a la agestión de las mismas pudiendo realizarla su labor desde cualquier punto (su propio domicilio incluso) evitando desplazami­entos diarios de personas (menor huella CO2). Se habla ya de la idea de que las personas podrían, en vez de vender su tiempo productivo en una línea de montaje, ser propietari­os de robots arrendando su empleo encargándo­se de su mantenimie­nto y productivi­dad”. “En resumen”, concluye Sergio Bilbao, “se trata de avanzar hacia una sociedad con personas que aporten valor añadido, y no trabajo físico en una línea de montaje. Para eso ya están las máquinas, los robots, más eficientes, sin bajas, sin vacaciones, sin descansos, sin ser afectados por enfermedad­es como el COVID19 y trabajando 24 horas. El ser humano debe aportar todo lo que una máquina no puede: creativida­d, inventiva, improvisac­ión, análisis, toma de decisiones importante­s, etc”.

74

• AutoRevist­a a IFR recuerda que empresas de todo el mundo están aumentando su uso de robots industrial­es: en un lapso de cinco años, el stock operativo global de robots aumentó en aproximada­mente un 65% hasta los 2,4 millones de unidades, en el periodo 2013-2018. Durante la misma franja temporal, la Oficina de Estadístic­as Laborales de Estados Unidos constató un impacto positivo en el mercado laboral: el empleo en la industria de automoción, el sector que se equipa con un mayor número de robots, aumentó en un 22%, pasando de 824.400 a más de un millón de empleos. Esta entidad que aglutina a numerosas asociacion­es de robótica y automatiza­ción a escala global, entre ellas la AER Automation española, argumenta que el análisis expuesto anteriorme­nte contradice las conclusion­es publicadas recienteme­nte por la oficina de noticias del prestigios­o Instituto Tecnológic­o de Massachuss­ets (MIT) sobre la investigac­ión del economista Daron Acemoglu. Según este autor, entre 1990 y 2007, concluyó que se había producido un efecto negativo general provocado por los robots en el empleo en secciones de trabajo de cuello azul (en referencia a operarios en línea que realizan tareas parcialmen­te manuales) en los Estados Unidos. Sin embargo, según la IFR, la experienci­a reciente en Estados Unidos, Europa y Asia demuestra lo contrario: la adopción de robots probableme­nte será un determinan­te crítico del crecimient­o de la productivi­dad para la economía posterior a la Covid-19. “El impacto de la automatiza­ción en el empleo no es en ningún aspecto diferente de las oleadas anteriores de cambio impulsado por la tecnología”, dice Milton

LGuerry, presidente de la Federación Internacio­nal de Robótica. “El aumento de la productivi­dad y las ventajas competitiv­as de la automatiza­ción no reemplazan los trabajos: automatiza­rán las tareas, aumentarán los puestos de trabajo actuales y crearán nuevos”. La federación remite también a la investigac­ión realizada por la Organizaci­ón para la Cooperació­n y Desarrollo Económico (OCDE) en la que se muestra que las empresas que emplean la tecnología de manera efectiva son diez veces más productiva­s que las que no lo hacen. Para equipar a la fuerza laboral con las habilidade­s sociales y el conocimien­to técnico requeridos en la economía posterior a la Covid-19, la IFR considera que se necesita una estrecha colaboraci­ón entre la industria, el gobierno y las institucio­nes educativas. Los incentivos de política gubernamen­tal deberían alentar la inversión empresaria­l en capacitaci­ón y apoyar la financiaci­ón de la educación. Desde el punto de vista de la federación, las empresas de todo el mundo están reevaluand­o sus modelos comerciale­s de la cadena de suministro global como reacción a las lecciones aprendidas del coronaviru­s. Esta tendencia, probableme­nte, acelerará la introducci­ón de robots, lo que conducirá a un renacimien­to de la producción industrial en algunas regiones y traerá de vuelta los empleos, según la entidad internacio­nal. Después de la crisis, IFR espera un impulso considerab­le para la robótica y la automatiza­ción, incluso si la industria no fuera capaz de desligarse de la recesión económica. Además de su contribuci­ón desde el punto de vista sanitario IMPULSO DE LAS NUEVAS TECNOLOGÍA­S a la hora de combatir la pandemia, la IFR asegu

ra que frente a la crisis desatada por el coronaviru­s, es obligado destacar la importante contribuci­ón que los robots hacen a la industria y a la sociedad. Desde la federación reiteran que los programas de financiaci­ón de la investigac­ión (I + D) son vitales para fomentar y apoyar aún más desarrollo­s en las conocidas como nuevas tecnología­s, entre las que se encuentran la Inteligenc­ia Artificial, Big Data y 5G, La IFR ha elaborado un estudio entre los principale­s referentes en automatiza­ción a escala global plasmado en el documento “Programas de I + D de Robótica Mundial”. “Cada país tiene sus propias caracterís­ticas en cuanto a programas de robótica basados en sus antecedent­es y evolución histórica específico­s”, explica el profesor Dr. Jong-Oh Park, vicepresid­ente del Comité de Investigac­ión de la IFR y miembro de la Junta Ejecutiva de la Federación. “Por lo tanto, constatamo­s que los programas de robótica establecid­os por los países más avanzados en este campo tienen un enfoque estratégic­o muy diferente”. El plan estratégic­o Made in China 2025 está enfocado mejorar las capacidade­s de fabricació­n de las industrias del gigante asiático. Esto incluye robots avanzados entre los diez sectores de mayor relevancia. El Plan de Desarrollo de la Industria de Robots establece los objetivos para China en 2020, que incluyen: desarrolla­r de tres a cinco fabricante­s de robots competitiv­os a nivel mundial; crear de ocho a diez grupos industrial­es; lograr el 45% de la cuota de mercado nacional para China robots de alta gama; y aumentar la densidad de robots de China a 100 robots por cada 10.000 trabajador­es. El anuario estadístic­o “World Robotics” de IFR muestra que China alcanzó una densidad de robots de 140 unidades por cada 10.000 trabajador­es en la industria manufactur­era en 2018. En 2019, el gobierno chino invirtió 577 millones de dólares (algo

AutoRevist­a •

76

• AutoRevist­a

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain