NOMBRE PROPIO:
Además de la clásica sobrasada, Can Company innova con el producto. Un ejemplo es su sobrasada con queso azul pirenaico de Molí de Ger, que tiene nombre propio: Sa Blava.
Solo se comercializan unos 2 000 kilos de sobrasada al año. Su componente graso es muy inferior al de otras sobrasadas. para realizar con ellos nuevas y sorprendentes combinaciones”. No es palabrería, es pasar de un producto tradicional y pasivo a uno mucho más activo y contemporáneo que suponga una nueva experiencia organoléptica. En resumen, dar un paso más allá: de la charcutería a la cocina en frío.
Por ahora, varios de estos embutidos se venden en el Club del Gourmet de El Corte Inglés de todos los centros de España, y en breve tendrán habilitada la página web www.cancompany.es como tienda online.
La calidad de estos productos se encuentra fuera de toda duda, y varios chefs de renombre confían en ellos para elaborar algunos de sus platos, como Andreu Genestra o Fernando Arellano, ambos tocados por la varita mágica de Michelin. También en Madrid algunos cocineros como Alfonso Castellano, del restaurante Rooster, ofrecen la sobrasada clásica como un bocado gourmet. De todos modos, no pensemos que estos productos se venderán masivamente: su producción es limitada (unos 2 000 kilos de sobrasada al año), algo que les hace ser todavía mucho más exclusivos.
Me decía Reina en confidencia: “Me veo en el futuro haciendo productos vegetales, experimentando con sabores y texturas no animales”. Si su profecía o deseo se cumple, quizás perdamos a un gran charcutero pero, ¡qué fantástico domador de vegetales vamos a ganar! ¡Eso lo doy por seguro!