GIGANTES CÁRNICOS
Pero desde la perspectiva del sibarita eso es solo un simpático efecto secundario comparado con la orgiástica satisfacción que produce el consumo de típicos platos de hueso más grandes: ya sea una pierna entera de cordero, una paletilla o incluso la especialidad romana collo d‘agnello al forno, cuello de cordero al horno. O, por solo