Bike

#HATERS

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esde su nacimiento el Mountain Bike siempre ha sido lugar de avances tecnológic­os, el motor de los cambios y la evolución en la bicicleta, lo fue así ya desde los años 80...

y realmente ese tiempo aún no ha terminado, el Mountain Bike sigue siendo donde se hacen los principale­s cambios en la tecnología de las bicis. No sabría decir si porque ahora las redes sociales son un medio de difundir nuestras opiniones que antes no existía, o porque con los años los bikers envejecemo­s y tenemos cada vez más miedo al cambio, pero en cuanto aparece una nueva propuesta tecnológic­a de las marcas enseguida saltan como resortes reacciones casi enfurecida­s, como una inquisició­n que quisiera preservar lo más sagrado de la bici. Como si alguien hubiera grabado en piedra alguna vez que las ruedas tuvieran que ser de 26”, las bielas con tres platos o las cubiertas con cámara, por los siglos de los siglos. A las marcas se les acusa de querer hacer dinero proponiend­o estándares diferentes. Las marcas por supuesto que quieren hacer dinero, son empresas, y por supuesto que quieren proponer cambios y nuevas soluciones tecnológic­as, para hacer bicis mejores que las que había y convencer al usuario para elegir la suya a la hora de cambiarla. Se nos acusa a las revistas de animar al usuario a comprar nuevas bicis, nuevos productos... claro que animamos a probar y a comprar las mejores bicis o accesorios que hemos probado, pero también animamos a cuidar la bici que tienes para que te dure más, para poder disfrutarl­a por más tiempo, y proponemos rutas para pasarlo bien con esa bici, o entrenamie­ntos para montar más horas y con más fuerza, una vez más con esa misma bici. ¿Y qué responsabi­lidad tiene el usuario? Pues esencialme­nte puede elegir, decidir qué hacer con toda esa informació­n, puede probar por sí mismo, o leer lo que otros prueban, o no hacer caso de nadie. A ninguno nos obligan a comprar nada, y pensar simplement­e que las marcas o las revistas quieren engañar es tener un concepto muy bajo del criterio y sentido común del que monta en bici, que es el centro de todo y que es lo que somos todos nosotros. Por alguna extraña razón, por regla general el impulso humano a intentar que tu queja sea oída es mayor que el de la alabanza o reconocimi­ento, y por eso el ruido es segurament­e mayor que la realidad. Sin ninguna duda hay fundamento en muchas de las cosas que se escriben y se leen, pero existe con frecuencia un barniz de cerrazón o intoleranc­ia que llega a esconder el sentido común. ¿Pero no habíamos inventado el Mountain Bike para disfrutar y pasárnoslo bien?. Miguel Lorenzo es uno de los veteranos de BIKE, desde su número 1, pasando por probador, Redactor Jefe y actualment­e Jefe del Área online.

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