TRANSICIÓN
EL INVIERNO SUELE SER EL MOMENTO EN QUE LA MAYORÍA DE BIKERS CIERRAN SU TEMPORADA, O POR LO MENOS BAJAN EL RITMO DE ENTRENAMIENTO Y EMPIEZAN A PENSAR EN LOS SIGUIENTES RETOS. EN ESTE ARTÍCULO VAMOS A VER CÓMO PODEMOS ORGANIZAR ESTA TRANSICIÓN ENTRE TEMPOR
LA FASE DE TRANSICIÓN SERÍA EL PERIODO QUE VA DESDE LA ÚLTIMA COMPETICIÓN O EL ÚLTIMO ENTRENAMIENTO/ SALIDA EXIGENTE DE LA TEMPORADA, HASTA QUE VOLVEMOS A ENTRENAR CON EL OBJETIVO DE MEJORAR NUESTRA FORMA DE CARA LOS OBJETIVOS DEL SIGUIENTE AÑO. Nuevamente, como comentamos en casi todos los artículos, la individualización es clave. Habrá muy diferentes perfiles de ciclistas. El rango entre el ansiolítico competitivo y obsesivo compulsivo del entrenamiento y el relajado biker de fin de semana, sin ambiciones deportivas, es muy amplio. En medio, multitud de perfiles cuyo único rasgo en común salir al campo en bicicleta frecuentemente. Pues, como es obvio, la forma de enfrentar el fin de temporada de cada uno, será muy diferente.
LA PÉRDIDA DE LA FORMA
Nos guste o no, no se puede estar todo el año en la mejor forma de nuestra vida. Habrá momentos de mejor y de peor forma, seamos un profesional o un ciclista ocasional. El cuerpo es cíclico, tiene altos y bajos. Cuando planificamos el entrenamiento, además de intentar llevar nuestro nivel de forma al máximo posible, lo que buscamos es que esos mejores momentos de forma lleguen cuando queremos, y no de forma circunstancial. Para lograr esto es importante organizar los periodos del año donde vamos a bajar esa forma hasta el nivel mínimo que nos permita descansar y recuperar, pero que no comprometa nuestro rendimiento la siguiente temporada. Porque debemos tener muy claras dos cosas, igual que no descansar lo suficiente y estar todo el año compitiendo y entrenando a lo máximo que nos da el cuerpo, es malo y suele llevar a estancamientos, o incluso peor, a estados de fatiga crónica o sobre entrenamiento, lo contrario, descansar mucho tiempo y estar parado largos periodos, también es malo y perjudicial para nuestro rendimiento sobre la bici. Se debe buscar un equilibrio. Por eso decimos que lo ideal es descansar lo justo para recuperar las fuerzas y las ganas de montar y entrenar, pero perdiendo la menor forma posible. Se trataría de intentar que el mínimo de forma de cada invierno fuera un poco mejor cada año.
LA CABEZA
En esta fase de transición la parte mental será la prioritaria. Empezar la temporada con ganas y con ilusión es lo prioritario de esta fase. Debemos dar prioridad al aspecto psicológico y motivacional. Y en este aspecto psicológico cada uno debe conocerse. Saber su motivación, lo que le llena. Lo que le condiciona el día a día. Realmente hay ciclistas que podrían estar todos los días de su vida montando en bici y serían felices. Para otros es placentero, pero mientras no suponga un estrés añadido a la vida diaria. Algunos solo se motivan con retos especiales. El caso es que debemos saber escuchar a nuestra cabeza, saber si nos pide un largo reposo de bici para renovar la motivación, o solo una pequeña pausa, o si tal vez nuestras ganas de bici solo conocen el límite de la fatiga física. Por eso, en este punto, nuestro consejo al final de temporada es que te dejes llevar, que no te obsesiones con programas de entreno o consejos estándar sobre periodos o fechas. Si no te apetece salir en bici, no salgas. Si llevas dos días sin bici y ya tienes mono… coge la bici y a disfrutar de tus rutas favoritas o de la charleta del grupo. Si hay