PRUEBA: OPEL CORSA GLP
Ya son varios los fabricantes que ofrecen, al menos, una variante de Auto Gas en su gama. Uno de los mejores ejemplos es Opel; la firma alemana dispone de opciones impulsadas por GLP para los Adam, Corsa, Astra, Mokka y Zafira. Nosotros hemos comprobado las virtudes de este combustible alternativo en el Corsa. La instalación del sistema de Auto Gas –de serie– no repercute de ninguna manera en el aspecto del vehículo o la habitabilidad interior. El depósito de GLP ha sido ubicado en el hueco para la rueda de repuesto y los materiales utilizados para su construcción garantizan la seguridad en caso de accidente. Un botón situado en la consola central permite escoger con qué combustible circular: GLP o gasolina mientras que un indicador en el panel de instrumentos informa de la autonomía disponible en cada caso. El bloque atmosférico de 1.4 litros entrega 90 caballos de potencia y su condición bifuel le convierte en la alternativa más eficiente de toda la gama. En modo gas ahorra un 50% en el coste del combustible –consume 6,9 litros de GLP en ciclo combinado–, mientras que las emisiones de CO2 se reducen en un 13% respecto al modo gasolina –113 gramos por kilómetro–.