Curvas con el MX-5.
La filosofía Jinba Ittai –fusión entre el conductor y el coche– que inspira al MX-5, alcanza su máxima expresión en la Transfagarasan, una de las carreteras más espectaculares del mundo #
Cubrimos la mítica Transfagarasan con el espectacular roadster.
En 1968, la Unión Soviética y sus aliados invadieron Checoslovaquia para detener la llamada Primavera de Praga, que buscaba liberarse del totalitarismo al que estaban sometidos. El entonces dictador rumano Nicolae Ceausescu, que no participó en la invasión, decidió, ante el temor de que pudiera repetirse algo parecido, asegurar un acceso rápido hacia el norte del país a través de las montañas, estableciendo una ruta más fácil de defender que los demás pasos existentes en los Cárpatos meridionales.
Esta ruta, que atraviesa los montes Fagaras, conecta las regiones históricas de Valaquia y Transilvania y es una de las carreteras más bonitas y divertidas para conducir. Fue construida entre 1970 y 1974 por las fuerzas armadas, con soldados de reemplazo sin experiencia en desmontes de terreno o voladuras, que tuvieron que trabajar con más de 6.000 toneladas de explosivos en un clima alpino a más de 2.000 metros de altitud. Según cifras del ejercito, unos 40 perdieron la vida en esta obra, aunque fuentes no oficiales sitúan esta cifra en varios centenares.
Donde no hay rectas
A lo largo de sus 90 kilómetros, la también llamada ‘la locura de Ceausescu’ nos lleva hasta una altura de 2.034 metros pasando entre los picos más altos del país, el Moldoveanu y el Negoiu,
en una sucesión de horquillas y curvas con subidas y bajadas abruptas, unidas por tramos rectos tan cortos, que no dan tiempo para tomarse un respiro. Y es aquí donde Mazda nos ha permitido disfrutar de la versión más potente del MX-5 2019, el roadster biplaza más vendido en el mundo. Menos mal que estamos en verano porque la Transfagarasan permanece cerrada entre los meses de octubre a junio por la nieve, que puede llegar a los tres metros de altura, sin excluir que algún año, una nevada extemporánea en agosto obligue a prohibir la circulación.
Esta versión es la que más ha evolucionado de cara a 2019, sobre todo en la mecánica. Su motor dos litros pasa de 160 a 184 caballos de potencia y alarga su régimen de funcionamiento hasta las 7.500 revoluciones. Gracias al trabajo realizado a nivel de gestión de la admisión y el escape y al aligeramiento de piezas móviles, la curva de par, casi horizontal, nos permite disponer del 80% de la cifra máxima desde las 2.000 vueltas, lo que hace que su respuesta y flexibilidad hayan mejorado sensiblemente respecto al anterior modelo.
El motor nos gusta desde el arranque, con un sonido potente y vibrante. Su empuje es constante desde abajo y no se hace necesario estirarlo hasta su máximo régimen para ir rápido. La sucesión de apoyos nos confirma sus excelentes cualidades ruteras en un firme a veces irregular, y la calidad de la caja de cambios, rápida y precisa, a la que hemos hecho trabajar duro. Como opción puede montar una automática de seis relaciones con convertidor de par pero, a falta de prueba, nos parece que la filosofía del MX-5 decanta la decisión por el cambio manual de serie.
La dirección está en consonancia con el equilibrio dinámico conseguido. Responde con suavidad y eficacia y en todo momento nos hace sentirnos plenamente dueños del trazado.
Historias truculentas
El regreso, por la misma ruta ya conocida, nos empuja a exprimir un poco más sus cualidades buscando mayor emoción sin que lleguemos a acercarnos a los límites del Mazda, que están mucho más allá de lo que nuestra prudencia aconseja. Aun así, en algunas curvas y con el piso mo- jado, llegamos a agradecer el control de estabilidad, que ayuda a no meternos en situaciones apuradas.
En el recorrido nos encontramos con las ruinas del castillo de Vlad III el Empalador. Nos desanima el hecho de que hay que subir 1.500 escalones para llegar a sus puertas, dada su situación en lo alto de un precipicio, que le permitió contener la invasión otomana. Fue su crueldad la que inspiró a Bram Stoker para dar vida al igualmente sanguinario Conde Drácula, que ve reflejado su nombre en el camping situado al pie del castillo…
El MX-5 más vendido es el dos litros con techo duro y máximo equipamiento