Regent Street, coches para todos
La mítica calle comercial de Londres se convierte en un espectacular salón del automóvil
Desde hace 10 años, en el primer fin de semana de noviembre, la conocida Regent Street de Londres, que une plazas tan famosas como Picadilly Circus y Oxford Circus, se cierra al tráfico y el centro de atención de los viandantes ya no son los escaparates de las lujosas tiendas que han convertido a esta calle en una de las más famosas del mundo. El Regent Street Motor Show es un evento distinto en una gran capital europea, ya que es el único salón del automóvil en la calle de una ciudad, abierto a todo el público y completamente gratuito. El éxito de esta iniciativa del Royal Automobile Club de Reino Unido es indiscutible y los más de 500.000 visitantes del sábado pudieron admirar desde vehículos con más de un siglo a los más modernos coches eléctricos. El recinto de este curioso salón del automóvil en la calle alberga también los vehículos más veteranos, construidos antes de 1905, que el domingo toman la salida para el Londres-Brighton, la carrera más antigua del mundo y todo un repaso por la historia de los pioneros del automóvil. Este año ha sido el segundo de colaboración con Illinois Route 66 y los vehículos americanos tuvieron un especial protagonismo, con curiosidades como una réplica del Ford Mustang Bullit y varios muscle-cars así como una amplia exposición de motos Harley Davidson. Por supuesto también se celebra un concurso de elegancia entre los clásicos que se exponen y el primer premio de este año fue para un Mercedes de 1904 en un espectacular estado de conservación. Pero en el Regent Street Motor Show no solo hay coches porque es un evento pensado para toda la familia y las actuaciones musicales en directo, grupos de baile y toda clase de animaciones para niños y mayores consiguen que nadie se aburra... Si es que es posible aburrirse con tantos y tan variados automóviles. Este peculiar evento forma parte de la London Motor Week, organizada por el Royal Automobile Club, que durante toda una semana convierte al automóvil en protagonista absoluto.