El misil se pone al día
Actualización estética y de equipamiento junto a una ligera puesta a punto permiten al RS 5 seguir tratando de tú a tú a rivales como el BMW M4 y el Mercedes C63 S, pero sin caer en extremismos
ace años que el segmento de los cupés de altas prestaciones no contaba con la oferta actual de modelos, entre los que destacan por méritos propios el BMW M4 y el Mercedes-AMG C63 S Coupé; y a los que ahora se suma una nueva evolución del que bajo nuestro punto de vista es el más equilibrado de todos, el RS 5, que aterriza en variantes de carrocería Coupé y Sportback.
En materia de imagen, su carrocería sigue la senda de los RS 6 y RS 7, para lo cual adopta la nueva parrilla frontal ensanchada así como taloneras laterales rediseñadas y un difusor trasero más llamativo, el conjunto se completa con llantas inéditas y dos nuevos colores. Dentro, las modificaciones tampoco son muy
Hllamativas; se mantiene la combinación de materiales de lujo en los que predomina la deportividad, pues no falta el aluminio, la fibra de carbono, la piel o el ante. Estrena grafías y diseños en el cuadro de instrumentación TFT en el que cobra protagonismo la información del cuentavueltas, incluyendo además datos de telemetría como las fuerzas G.
Una pantalla multimedia ligeramente mayor y levas de cambio más accesible completan el habitáculo tanto en la variante Coupé como en la Sportback.
Hasta aquí los cambios que saltan a primera vista, mientras que lo que no se ve apenas sufre modificaciones. Bajo el capó mantiene el mismo V6 biturbo con 450 caballos de potencia,