Decálogo.
Pon tu coche a tono tras la vuelta de las vacaciones.
Es conveniente hacer una inspección a fondo a la vuelta de vacaciones porque tiene que seguir impecable el resto del año.
Como todo en este 2020, el verano ha sido más extraño de lo habitual y, aunque no todo el mundo ha podido disfrutar de las vacaciones como otras veces, quien más quien menos ha pasado parte de la época estival en la carretera, ya sea para hacer turismo rural y conocer nuevos lugares dentro de nuestras fronteras, para disfrutar de unos días de playa o para descansar en el pueblo. Tu coche ha sido el compañero de viajes en cualquiera de estos planes y hay elementos del vehículo que han sufrido mucho a lo largo de estos meses, tanto por el calor, como por haber recorrido más kilómetros de lo normal. Ahora que se acaban las vacaciones y comienza una nueva temporada, es el momento de revisarlo a fondo para garantizar el correcto funcionamiento de todos sus componentes de cara a los meses de otoño e invierno. Te contamos cuáles son las cosas que conviene revisar para empezar el curso de la mejor manera posible.
1. LIMPIEZA A FONDO
El polvo, el impacto de los mosquitos, los excrementos de las aves y el salitre concentrado en los bajos después de visitar una zona costera son los peores enemigos de tu coche. Es el momento de dejarlo reluciente para evitar la corrosión de algunos materiales y lograr que la pintura recupere todo su esplendor.
2. TAMBIÉN POR DENTRO
En el interior también se acumula suciedad. Antes de nada, revisa que no te has dejado ningún objeto en el habitáculo, como la sombrilla, que ya no te va a hacer falta hasta el año que viene y está mejor en el trastero que en el maletero. Después, pasa el aspirador por todos los rincones y utiliza una microfibra para dejar impecables todas las superficies.
3. NIVELES DE LÍQUIDOS Y ESTADO DE LOS FILTROS
Es recomendable cambiar todos los filtros, sobre todo el de aire y el de polen porque habrán acumulado muchas impurezas a lo largo del verano. Por otro lado, el coche puede consumir algo de aceite o tener una pequeña fuga de refrigerante, por lo que conviene revisar todos los líquidos, incluido el del limpiaparabrisas, que puede estar bajo mínimos si no se ha rellenado desde hace meses.
4. BATERÍA
Especialmente si lleva puesta varios años, es aconsejable
comprobar el estado de la batería; en invierno sufre mucho con el frío y puede dar problemas a la hora de arrancar el vehículo o directamente desfallecer. Comprueba la carga y, si es inferior a 12,6 voltios, cámbiala.
5. LIMPIAS NUEVOS
El calor reseca las escobillas de los limpiaparabrisas, provocando que limpien peor o dejen rastros incómodos en la luna cuando hacen el barrido; también se resiente su estado por el polvo que se acumula en los cristales. Ahora que llega el frío y llueve más, hazte con unos nuevos. No cuestan mucho y son fundamentales para ver bien la carretera en cualquier situación.
6. VER Y SER VISTO
En invierno utilizamos más el sistema de alumbrado. Comprueba que no se ha fundido ninguna bombilla y que el nivel de los faros es el correcto. Si la carcasa se ha vuelto opaca, no dudes en pulirlos.
7. NEUMÁTICOS EN FORMA
Las ruedas mantienen al coche en contacto con la carretera y garantizan la seguridad de todos los ocupantes. Revisa su estado, que no tengan desgastes irregulares o ‘pellizcos’ en los flancos. Si es necesario, sustitúyelas por unas nuevas, siempre de primeras marcas.
8. DOCUMENTACIÓN
Verifica que llevas todos los papeles dentro del vehículo. Puede que los hayas sacado en algún momento y te los hayas dejado en la casa del pueblo o una maleta.
9. ¿HAS PASADO LA ITV?
Si la ITV de tu coche venció entre el 21 de junio y el 31 de agosto, recuerda que el Gobierno concedió una prórroga de tres meses para no colapsar los centros de inspección debido a la situación excepcional que vivimos a consecuencia del Covid-19.
10. HAGA FRÍO O CALOR…
El climatizador es básico para tener un buen confort de marcha. Comprueba que el aire acondicionado sigue enfriando y que la calefacción funciona, todavía quedan algunos días de calor y cuando venga el frío, necesitarás desempañar los cristales y no congelarte.