Car and Driver (Spain)

Peugeot 508 PSE. Alcanza los 360 caballos y acelera de 0 a 100 en casi cinco segundos.

- CARLOS GARCÍA-ALCAÑIZ

La nueva división Peugeot Sport Engineered firmará las versiones más deportivas de la marca francesa, ya sean eléctricas o híbridas enchufable­s. Este último es el caso del espectacul­ar 508 PSE, que anuncia una potencia máxima de 360 caballos en modo Sport y un 0 a 100 de 5,2 segundos…

El 508 PSE es el Peugeot más potente fabricado en serie en los 210 años de historia de la marca. Primero por el diseño, ya que el kit de carrocería es prácticame­nte idéntico al del prototipo homónimo de 2019, con el que comparte elementos como los paragolpes, las llantas de 20 pulgadas, la doble salida de escape, una serie de aletines que nos recuerdan a los del Golf GTI TCR, o un difusor posterior más propio de un supercar. Y, segundo, por la tecnología que esconde, ya que tiene tres motores para propulsars­e, uno gasolina de 200 caballos –el famoso 1.6 Turbo que tan buen resultado ha dado en multitud de modelos de Peugeot y Citroën y hasta de Mini– y dos eléctricos, uno por eje, el delantero con 110 caballos y el trasero con 113 caballos. De esta forma, este 508 tiene 4x4, con un funcionami­ento similar al quattro ultra de Audi.

En la élite

En total son 360 caballos y 53 kilográmet­ros de par máximo en el modo Sport, si bien en el resto de programas de ➥

conducción disponible­s –4WD, Hybrid y Confort–, la potencia es ligerament­e inferior, de unos 330 caballos. Para que todo este sistema funcione, también hay que tener en cuenta las baterías de iones de litio de 11,5 kWh que se encuentran bajo los asientos traseros. Por eso, la habitabili­dad y el maletero son iguales a los de cualquier otro 508, con cofres de 487 litros en el tres volúmenes y 530 litros en el familiar. Sí, porque el ranchera también está a la venta con esta terminació­n PSE por 1.200 euros más. Las pilas, por cierto, tienen una garantía de carga del 70% en los primeros ocho años ó 160.000 kilómetros, lo que suceda antes.

Buenas sensacione­s

Ya en marcha y en condicione­s normales, el 508 PSE funciona como el 508 Hybrid. Pero hay sutiles cambios entre ellos, que empiezan por el asiento, más bajo en el PSE; continúan con el tapizado de las butacas, de cuero, tela y Alcantara; y termina con la instrument­ación, adaptada a esta variante deportiva enchufable.

En el día a día, los teóricos 42 kilómetros de autonomía eléctrica que homologa dan para moverse única y exclusivam­ente con la energía acumulada en las baterías. En la práctica, se pueden recorrer más de 30 kilómetros en modo cero emisiones incluyendo más de una alegría con el acelerador. Peugeot confirma que el 508 PSE circula hasta 140 kilómetros/hora en eléctrico y que la potencia máxima conjunta de sus dos propulsore­s eléctricos es de 140 caballos. El coche monta un cargador de 3,7 kWh y por apenas 300

EL 508 PSE ES RÁPIDO Y FÁCIL DE CONDUCIR, UN SOCIO PERFECTO PARA TODO EL QUE BUSCA MÁXIMAS PRESTACION­ES Y EFICIENCIA

euros, sustituye éste por uno de 7,4 kWh, que reduce el tiempo de recarga a poco más de hora y media.

Hora de la verdad

Parte del recorrido de pruebas con el 508 PSE tiene lugar en el siempre especial Circuito del Jarama. Según abandonamo­s el pit lane, selecciona­mos el modo Sport, que endurece la suspensión y la dirección y, recordemos, nos hace disponer de esos 360 caballos de potencia máxima. Otra de las ventajas de esta función Sport es que retrasa la entrada de las ayudas electrónic­as hasta el punto de dejar cierto margen al derrape, aunque si te pasas, termina por intervenir.

La aceleració­n es bastante progresiva y contundent­e, aunque notamos cierto retraso entre que levantamos el pie del acelerador y hasta que el coche deja de empujar. Donde se aprecia muy bien la labor de la tracción integral es en las curvas, al permitir un paso superior al de un 508 normal debido al trabajo del motor eléctrico trasero, que funciona hasta 190 por hora y tira de la zaga incluso cuando el indicador de carga de la batería del cuadro de mandos pone que está a cero –existe una reserva–. Para que esa motricidad sea tan sobresalie­nte, el 508 PSE tiene la ayuda de unos neumáticos ‘pata negra’, los Michelin Pilot Sport 4S en medida 245/35 sobre llanta de 20 pulgadas –todo de serie–.

En general, el 508 PSE va tan fino que bien podría aguantar una motorizaci­ón más bestia; se siente cómodo y muy estable. Para lograr esto, el chasis cuenta con una suspensión McPherson en el eje anterior y de tipo multibrazo en el posterior. Además, la altura al suelo se ha reducido 11 milímetros delante y cuatro milímetros detrás, se han añadido unas barras de refuerzo y las vías crecen 24 y 12 milímetros respectiva­mente.

A la hora de frenar, el 508 PSE cumple con nota y afortunada­mente no tienen un tacto distinto al de un coche ‘normal’. Los discos delanteros son específico­s, tienen un diámetro de 380 milímetros y unas pinzas de cuatro pistones pintadas en amarillo Kryptonite, el color que se utiliza en otras partes del vehículo, incluidas las rayas del logo, y que es exclusivo de la división Peugeot Sport Engineered.

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El color gris selenium de las imágenes sólo está disponible en el 508 PSE, al igual que los elementos decorados en amarillo ‘criptonita’.
EXCLUSIVO. El color gris selenium de las imágenes sólo está disponible en el 508 PSE, al igual que los elementos decorados en amarillo ‘criptonita’.
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El i-Cockpit le sienta francament­e bien al 508 PSE, ya que facilita el manejo. De serie trae faros de led, cuadro de mandos digital, visión nocturna, control de crucero adaptativo…
ALIADO. El i-Cockpit le sienta francament­e bien al 508 PSE, ya que facilita el manejo. De serie trae faros de led, cuadro de mandos digital, visión nocturna, control de crucero adaptativo…
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