Duelo tulipán
Que los Países Bajos dominan el ciclismo femenino a nivel internacional es indiscutible. Sólo hay que mirar el Ranking UCI, donde dobla en puntos a Italia en la versión por países y copa las tres primeras plazas de la versión individual. Tercera es la eterna Marianne Vos (WaowDeals), ganadora este año del BeNe Ladies Tour y la Vuelta a Noruega. Entre la segunda, Anna van der Breggen (BoelsDolmans) -foto inferior-, y la primera, Annemiek Van Vleuten (Mitchelton-Scott) -arriba-, hemos vivido una interesante sucesión de duelos. Van der Breggen, más joven y explosiva, fue la mejor en pruebas de un día como atestiguan sus triunfos en Strade Bianche, Flandes, Flecha y Lieja. En las rondas por etapas, sin embargo, ganó la mano Van Vleuten, veterana y fondista, que se adjudicó el Giro Rosa y el Boels Ladies Tour. Ambas superclases se enfrentaron en la Bira: disputaron la general hasta la última etapa, que volcó la contienda en favor de Amanda Spratt, compañera de Van Vleuten. La experta se impuso también en una inusualmente escarpada edición de La Course del Tour de Francia, rebasando a Van der Breggen en los 100 metros finales, y en la crono del Mundial de Innsbruck, mejorando su registro en treinta segundos. Van der Breggen se desquitó en la prueba de línea, campeona del mundo con una exhibición en solitario aprovechando que la estrategia de equipo -y una dura caída- limitaban a su rival. También hubo espacio en la temporada para que Coryn Rivera (Team Sunweb) se confirmara como velocista reina imponiéndose a lo largo de cinco jornadas en el llanísimo OVO Energy Women's Tour británico. La estelar polaca Kasia Niewiadoma (Canyon-SRAM) se anotó el Trofeo Alfredo Binda y le birló a Mavi García el Tour d'Ardèche en la penúltima etapa. En el final en alto de esta prueba en el Mont Serein, una vertiente del Mont Ventoux, logró un extraordinario éxito la balmasedana Eider Merino.