Hacia una movilidad y unas ciudades más sostenibles
La tercera pata del plan de recuperación de la Unión Europea es la mejora de las infraestructuras. Este objetivo entronca con la transición energética y la digitalización. Por una parte, se quieren promover medios de transporte más sostenibles y con menor huella de carbono, como el ferrocarril, además de hacer los edificios de oficinas y los de las Administraciones más eficientes. Por otra, se necesitará mejorar la infraestructura de repetidores y fibra óptica para lograr que el 5G llegue también a las áreas rurales.
Las inversiones en proyectos de infraestructura sostenible están planificadas, con una dotación de 20.000 millones de euros, para promover los servicios ferroviarios y el transporte local sin emisiones. Otro foco de atención es la renovación de los edificios para conservar la energía. Se espera que la tasa de renovación aumente al 3% desde el 1% actual. “Las constructoras y los subsectores de la construcción con especial experiencia en ahorro energético, como los especialistas en aislamiento, se beneficiarán a largo plazo, así como las empresas que dependan del gasto estatal en infraestructuras o los especialistas en la expansión ecológica del transporte local”, apuntan desde BNP Paribas Wealth Management.
En lo que respecta a las empresas, una esfera de especial interés es la de la movilidad sostenible e inteligente. Los planes se centran en formas de transporte público y privado más limpias, baratas y saludables. “Dos empresas que están muy bien preparadas para sobresalir en esta coyuntura son el grupo francés Alstom y el grupo holandés Alfen”, según explica Suzanne Senellart, gestora de carteras en la gestora Mirova, especializada en inversión sostenible.
Los expertos también señalan a los grandes contratistas con la Administración pública, como las españolas ACS y Ferrovial, o las francesa Eiffage y Saint-Gobain, como potenciales ganadoras en este aumento sin precedentes del gasto público para hacer frente a los estragos económicos que ha provocado la pandemia del coronavirus. “Creemos que la firma Saint-Gobain, especializada en la fabricación de materiales de construcción de alto valor añadido, se beneficiará de la mejora en infraestructuras y viviendas ecológicas”, asegura Brian O’Reilly, director de inversiones de Mediolanum International Funds.