Primer Contacto
Audi Q3
Sofisticación y comportamiento de primer orden, casi impropio de un SUV, con más tamaño y versatilidad.
Incluso si no eres especialmente aficionado a los SUV, el Q3 tiene bastantes papeletas para gustar a todo tipo de público, entre otras cosas porque su comportamiento parece obviar en la medida de lo posible muchas de las limitaciones de este tipo de vehículo. Además de una postura al volante muy de turismo, con el volante muy vertical, se siente ligero y preciso, con reacciones muy inmediatas a nuestras órdenes, un notable control y facilidad de conducción incluso en condiciones exigentes. Los límites del bastidor son muy altos, y a esto hay que sumar las casi inexistentes inercias que se generan, fruto de la discreta intervención de las ayudas electrónicas en los momentos apropiados, de manera preventiva pero prácticamente sin restar naturalidad a la conducción. La tracción total aporta un brillante equilibrio entre trenes, y hasta cuando el eje trasero se ve obligado a deslizar ligeramente para redondear el giro, en todo momento resulta muy neutro, sin apenas desviarnos de la trazada ni complicar la conducción.
Dinámica al gusto
Por otro lado, no falta un control de descensos, ni los habituales modos de conducción (Auto, Comfort, Dynamic, Offroad, Efficiency e Individual) para adaptar la personalidad del coche a nuestro gusto, y que actúan sobre la dirección, el cambio
automático y su función de circulación por inercia, la respuesta del motor, la dureza de los amortiguadores pilotados, los faros adaptativos, el climatizador, el control de crucero activo y hasta el sistema precolisión. La dirección cuenta con bastante asistencia incluso en modo Dynamic, lo que contribuye a lograr la mencionada sensación de ligereza, mientras que la calidad de bacheo se mantiene a muy buen nivel, aunque no logra tanto confort como en el resto de programas de conducción.
De alto nivel
Otro punto en el que da un considerable paso adelante es en el equipamiento disponible. Puede contar con elementos como los faros led matriciales o un completísimo sistema de información y entretenimiento tomado directamente del A8, aunque con sólo una pantalla táctil en lugar de dos y algunas funciones simplificadas. Al igual que está ocurriendo en los últimos lanzamientos de la marca de los cuatro aros, se prescinde del mando giratorio del MMI, algo que permite un diseño interior más limpio, pero que requiere una mayor atención durante la conducción a la hora de manejar los sistemas, a pesar de lo intuitivo de sus menús. Es, en definitiva, muy convincente en todos los apartados. GAMA: 1.5 TFSI (150 CV); 2.0 TFSI (190); 2.0 TFSI (230 CV); 2.0 TDI (150 CV), este último disponible más adelante