Cocina vegetariana Extra (Connecor)
Tus plantas energéticas
El mundo vegetal te ofrece un amplísimo repertorio de plantas medicinales que pueden ayudarte a sentirte mejor. Es difícil decidirse por cuáles te convienen y te recomendamos que acudas siempre al consejo de un experto.
No obstante, te describimos algunas de las plantas que más energía pueden aportarte para que no falten nunca en tu cocina. • Ajenjo ( Artemisia absinthium). Planta dedicada por los antiguos griegos a Artemisa (Diana, para los romanos), diosa de la fecundidad. Sin duda que para ello influyó su notable efecto sobre el útero, ya que provoca la menstruación y regula su ciclo. Además, es un potente tónico estomacal y aumenta la secreción biliar. • Ajedrea ( Satureja montana). Planta pequeña pero frondosa en cuyas hojas aloja una glándula repleta de esencia, que es lo que provoca su intenso aroma. Es antiséptica, aperitiva, digestiva, tonificante, astringente. Está muy indicada en casos de inapetencia, problemas digestivos y diarrea. Es muy potente, por lo que debe usarse en pequeñas cantidades. • Angélica ( Angelica archangelica). Originaria del norte, se extendía por Groenlandia. Debe su nombre a sus supuestos poderes contra la peste provenientes de sus características antivirales. La leyenda cuenta que el propio arcángel Gabriel se la ofreció a un ermitaño que se pudo curar de la peste. Además de digestiva y carminativa, es decir, útil para combatir los gases intestinales, tiene un importante efecto tonificante y equilibrador del sistema nervioso, lo que la hace muy indicada en casos de depresión, neurosis y debilidad nerviosa. Ayuda en estados de convalecencia, estrés o de exámenes.
• Cardo mariano ( Silybum marianum).
Su fruto contiene aceites, albuminoides, taninos y un principio amargo. Además, también contiene flavo-lignanos como la silimarina y otros compuestos parecidos. Tiene un efecto aperitivo y protege el hígado, además de ser digestivo, diurético y antipirético. Si lo cueces te proporciona diversas aminas como la histamina, la tiramina y la agmatina. Se está estudiando la posibilidad de darle los frutos a personas que padecen de tensión baja, para evitar caídas de presión bruscas. • Camedrio ( Teucrium chamaedrys). Su nombre científico se debe a Teucro, el príncipe de Troya. Siglos atrás se le atribuían muchas virtudes, como por ejemplo la de curar la gota, pero carecían de fundamento. Contiene un aceite esencial, taninos y principios amargos. Tiene un efecto tonificante sobre la digestión, y además favorece el funcionamiento de la vesícula biliar. Se emplea como aperitivo, como tonificante del estómago y ayuda a eliminar las flatulencias. • Escaramujo ( Rosa canina). Tiene unas vistosas flores blancas, y crece silvestre en las zonas de maleza y en los bordes de los bosques. Sus flavonoides proporcionan una acción diurética y protectora capilar. Las flores tienen una suave acción laxante y tónica. Tiene un elevado contenido en vitamina C, superior incluso al de las naranjas, y es un poderoso antioxidante. • Genciana ( Gentiana lutea). Dioscórides, el gran médico y botánico griego del siglo I d.C., ya le atribuía sus beneficios hepáticos y digestivos. Es una de las plantas aperitivas y digestivas más apreciadas, tanto que los recolectores la han puesto en peligro de extinción dado que tarda diez años en dar sus primeros frutos. También está muy indicada
en convalecencias de enfermedades febriles y en casos de depresión inmunitaria, ya que estimula el aparato inmunológico. • Ginseng ( Panax ginseng Meyer). La raíz del ginseng se utiliza por sus propiedades tonificantes desde hace más de cuatro mil años en China. Se introdujo en Europa a partir del siglo XVIII, y ha sido objeto de numerosos estudios científicos por sus reconocidas virtudes. Su nombre científico proviene de las raíces griegas pan (todo) akos (curación). Sus efectos afrodisíacos le han dado una gran popularidad en los países occidentales. Tiene muchísimas propiedades, y entre ellas cabe destacar que aumenta la resistencia física y la actividad intelectual sin crear dependencia ni causar excitación nerviosa. • Jengibre ( Zingiber officinale). Fue muy popular durante el Imperio romano y se vio relegado al olvido después de su caída, hasta que Marco Polo lo recuperó en su viaje a Oriente. Se utiliza su raíz, de sabor ligeramente picante. Está muy indicado para afecciones gástricas y nauseas, así como para problemas de corazón. Favorece la circulación sanguínea y aporta energía. Sus propiedades antivirales le hacen indicado en el tratamiento del síndrome de fatiga crónica. • Menta ( Mentha piperita). Es una de las plantas mas conocidas y utilizadas de entre las plantas medicinales. El olor es muy característico y penetrante, y proviene del mentol que contiene su aceite esencial; su aromático sabor deja una sensación de frescor en la boca. Incrementa la secreción de jugos gástricos y abre el apetito. Además es antiséptica, diurética y estimula el sistema nervioso. • Orégano ( Origanum vulgare L.). Es muy conocida en la cocina mediterránea e india, y también tiene múltiples utilidades como tisana. Está muy indicada para trastornos premenstruales, digestivos y catarrales. Es una de las plantas con más antioxidantes que se conoce. También resulta útil en tratamientos contra el cáncer y el sida. • Regaliz ( Glycyrrhiza glabra). Sus aplicaciones son muy amplias, y se recomienda en casos de acidez estomacal o para combatir la tos en los casos de bronquitis. Su contenido en ácido glicirricínico eleva la tensión arterial, por lo que no se recomienda a personas hipertensas. • Romero ( Rosmarinus officinalis). Esta planta recibe el sobrenombre de “gingseng mediterráneo”, lo que ayuda a hacerse una idea de sus propiedades. Además es un buen tónico digestivo y contribuye a au- mentar la tensión arterial, por lo que es muy recomendable para personas hipotensas. • Tomillo ( Thymus vulgaris). Es una planta que crece en muchos bosques mediterráneos y que se puede cultivar fácilmente en casa. De aroma intenso y amplios usos en la cocina, también es protagonista de muchas tisanas. Su esencia abre el apetito, por lo que va muy bien en casos de inapetencia y anorexia. Además, es digestiva, antiséptica, expectorante y antirreumática. También es eficaz para aliviar los síntomas del síndrome premenstrual. Contiene lisina, un aminoácido cuya deficiencia provoca cansancio y pesadez general.