El SSD ExtrEmo
Si quieres disponer de una unidad de almacenamiento con un rendimiento extremo, el Kingston DCP1000 SSD es la respuesta, aunque el precio no está al alcance de todos.
El almacenamiento SSD es la elección natural para usuarios que buscan un rendimiento y una experiencia de uso óptima en sus equipos. Para el común de los mortales, las soluciones M.2 o SATA son suficientes, pero en entornos profesionales donde ganar un minuto de tiempo supone ser capaz de entregar un trabajo a tiempo, o ser capaces de realizar más tareas y, por ende, facturar más, necesitan tecnologías ultra refinadas.
El Kingston DCP1000 SSD es un ejemplo de ello. Se trata de una unidad SSD con tecnología NVMe PCIe Gen 3.0 x8 con nada menos que hasta 7 GB/s de velocidad de transferencia.
Un cuatro en uno
Esta familia de unidades cuenta con tres modelos de 800 GB, 1,6 TB y 3,2 TB de capacidad. En nuestro caso, estamos ante una unidad que integra cuatro
unidades SSD en una, de modo que al instalarlo veremos, en el caso de esta unidad de 3,2 TB, cuatro unidades M.2 de 800 GB. Así, si queremos conseguir el máximo rendimiento habrá que configurar un RAID 0 con las cuatro unidades.
Cada una de estas unidades cuenta con su propia controladora PhisonPS5007-11 de ocho canales. La memoria NAND es Toshiba de 15 nm MLC, junto con memoria DRAM Kingston que hace las veces de caché.
La memoria NAND es MLC y no SLC, aunque a día de hoy, la
durabilidad no es un problema y tenemos cifras de casi 600 TB/día durante los cinco años
de garantía de la unidad, para escribir datos. O lo que es lo mismo, 3.332 TB de datos que se pueden escribir antes de que haya fallos en la unidad.
Para usos muy pro
Realmente, un usuario normal no necesita este nivel de rendimiento. Tampoco esta capacidad para una unidad SSD. Es un producto orientado a estudios de edición de vídeo donde haya que manejar películas y contenidos sin que el disco sea un impedimento. O en centros de datos donde haya que atender millones de peticiones con- tra una base de datos. También puede ser tuyo si te hace tener lo mejor en almacenamiento... y tienes 3.000 €.
CONCLUSIÓN
Esta unidad es una muestra de hasta dónde puede llegar hoy en día en tecnología de almacenamiento. La solución ideada por Kingston para ofrecer tan elevada capacidad es ingeniosa y funciona, con la flexibilidad que aporta ser capaces de elegir cómo usamos la unidad: en RAID o no.