Project titan
EL COCHE DE APPLE, MÁS CERCA
El sueño de conducir un coche de Apple está más cerca.
El sueño de conducir un coche de Apple parece cada vez más cercano. En los últimos meses, han aparecido nuevos detalles y hasta un socio para fabricarlo.
En 2014 a muchos se les dibujó una sonrisa, mientras que a otros probablemente se les borró. Y es que en un año en el que el 4G estaba despegando y prometía una nueva dimensión en cuanto a conectividad, Apple anunció que pretendía lanzar un coche. Nacía el Proyecto Titan.
En la sede de la marca de Cupertino, de donde han salido (y siguen saliendo) respuestas a necesidades que a priori nadie tiene, pretendían entrar a uno de los mercados más difíciles y competidos que existen. Y es que una cosa es hacer un móvil y convertirlo en un objeto de culto y otra muy diferente lanzar un automóvil con todo lo que eso conlleva.
Tim Cook, sucesor de Steve Jobs (fallecido en 2011), empezó fuerte: se crearon unos cuarteles secretos cerca de la sede principal y se contrató además a ingenieros de Ford y Daimler con los que se pretendía potenciar todo su desarrollo.
Desarrollo, por cierto, no exento de altibajos... y también de cambios de dirección. Es sabido que este tipo de empresas teme más al fracaso por no haberlo intentado que al fracaso por haberlo hecho. El caso es que la brújula apuntaba hacia diversas direcciones. En 2015 ya se publicaban avances con toda la información que se manejaba por aquel entonces y se ilustraba con renders que traducían todo lo que se sabía: el resultado iba a ser una especie de monovolumen casi simétrico, eléctrico y autónomo.
Pero no todo han sido buenas noticias. En
2016 ya se publicó lo siguiente: “Se cancela el Proyecto Titan”. En 2019, algo parecido: “Apple despide a 200 trabajadores del Proyecto Titan”. Con el hermetismo propio de la marca, que nunca ha confirmado ni desmentido la existencia de este proyecto, la tormenta fue poco a poco amainando. En la necesidad continua de información con la que alimentar las secciones de noticias digitales, la manzana cayó en el olvido en favor de otras frivolidades de la industria, principalmente protagonizadas por el inefable Elon Musk.
Sin embargo, en California la cosa no paró. Quien se desconectara en algún momento del coche de Apple, probablemente se sorprendería cuando en el
Tim Cook empezó fuerte: creó un cuartel secreto en Cupertino