Descarga, instala y aprende a utilizar asHaMpOO antispy

Con Windows 10, Microsoft se ha subido al tren de las grandes empresas tecnológicas y recoge datos de los usuarios. Ahora, el sistema operativo también te espía.

Como ya hemos mencionado antes, nada más salir Windows 10 al mercado, en 2015, aparecieron también aplicaciones para limitar la cantidad de procesos que funcionan en el sistema y cuya única finalidad es recolectar datos. La intención es evitar que toda esta información se envíe a Microsoft. Una de estas aplicaciones es Ashampoo AntiSpy. Es gratuita y, a continuación, te contamos cómo debes usarla para liberar el sistema de ojos y oídos atentos.

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En primer lugar, descarga AntiSpy desde la dirección bit.ly/3sjf Bfv. Pulsa luego sobre Download y descarga el fichero ejecutable. Verás que es extremadamente pequeño (menos de medio megabyte) y, además, no requiere instalación. Antes de ejecutarlo por primera vez, cierra el resto de programas, para así facilitar el trabajo de la aplicación. En su primera apertura, te sugerirá la creación de un punto de restauración. Esto es altamente recomendable, de modo que haz clic en Sí. De esta forma, si tu equipo acabara configurado de algún modo erróneo o si algo empezara a funcionar mal, siempre podrás restaurar ese punto y todo volverá al estado actual de manera automática. Dicho esto, debemos decir también que Ashampoo AntiSpy es un programa muy seguro. Sin embargo, debido a que interfiere directamente con los ajustes del sistema, toda precaución es poca.

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Una vez creado el punto de restauración, verás la interfaz principal del programa, que es extremadamente sencilla. Observa que simplemente se trata de una lista de opciones, que puedes activar y desactivar. El programa se ajusta automáticamente al español (o el idioma del sistema), con excepción de algunas entradas que siguen en inglés porque aún no están traducidas. En la parte superior derecha, aparece disponible una lista desplegable con algunas opciones para seleccionar grupos de ajustes. Por el momento, nada más iniciar la aplicación, déjalos como están.

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Si te fijas, las opciones solo pueden estar activadas o desactivadas; el estado más recomendable puede variar en cada caso, según la función de la que se trate y del momento concreto. Nosotros te vamos a ofrecer ahora los ajustes recomendados de la redacción, pero cada caso puede ser diferente y es posible que quieras activar o desactivar alguna de las entradas, aunque nosotros digamos lo contrario. En general, de las primeras cinco opciones disponibles, la única que deberías mantener habilitada es la denominada Activar el Filtro SmartScreen. Esta se encarga de comprobar los sitios web antes de que accedas ellos y siempre que uses el navegador Edge. Naturalmente, para ello, ha de enviar la información de navegación a Microsoft. Si no quieres esto, desactiva también esta opción. 4

Por otro lado, verás que no hay ninguna opción para guardar los cambios. Se debe a que estos se realizan en el mismo instante en el que utilizas el regulador. Las siguientes opciones que te interesan son Show detailed data usage, que te permite ver con detalle cómo usas las conexiones de datos de Windows, así como Do not show recently opened files y Do not show recently opened documents. Estas dos desactivan la lista de documentos y de aplicaciones recientes en el menú Inicio de Windows 10; si prefieres conservar estas listas, deberás dejar activadas las dos opciones. Por último, es importante que dejes habilitada Background applications are

enabled ya que, de lo contrario, se desactivará la posibilidad de mantener aplicaciones en segundo plano, y eso impide que la multitarea de Windows funcione correctamente. Solo en casos específicos querrás desactivarla (como un Windows en modo quiosco). 5

El próximo grupo de opciones es especialmente sensible, de modo que debes desactivarlas todas. La única que podría salvarse es Actualización automática de controladores. Sin embargo, las cinco últimas, que empiezan por Let, son muy espías: uso de datos de diagnóstico, de datos de email, de tareas y de contactos... Desactívalas y evitarás que tu lista completa de contactos acabe en manos de cualquiera. 6

A continuación, aparecen dos opciones que tienen que ver con la ubicación. No es imprescindible que se trate de un dispositivo móvil para que esta desactivación tenga sentido. Muchas aplicaciones utilizan los nombres de las redes WiFi que tienen a su alcance para cruzarlas entre sí y obtener una ubicación aproximada, aunque el equipo no tenga GPS. Eso, junto con la dirección IP que tienes asignada, puede situarte bastante bien en un mapa. De modo que, si no usas aplicaciones que necesiten tu ubicación, apaga ambos reguladores. 7

Seguidamente, verás dos grupos dedicados a la cámara y el micrófono. Si se trata de un portátil o un All-in-One, ambos estarán integrados; si es un ordenador de sobremesa, dependerá de lo que tengas conectado. En cualquier caso, con estas ocho opciones, puedes elegir si las aplicaciones recibirán o no acceso a la cámara y micrófono. Hoy en día, con el auge del teletrabajo y de aplicaciones como Meet y Zoom, es probable que tengas que activar algunas de estas opciones para poder trabajar y asistir a videoconferencias o reuniones remotas. Si no es así, puedes dejarlo todo apagado. 8

El próximo bloque contiene la configuración para el sistema de anuncios y publicidad integrado en Windows. En este caso, ‘publicidad’ también puede incluir consejos sobre cómo usar el sistema y sugerencias sobre nuevas apps. En principio, las siete opciones pueden estar apagadas y, especialmente, las dos últimas. Así, Receive ads by Bluetooth te permitiría recibir anuncios de tipo broadcast (para todos los que estén al alcance) mediante Bluetooth (por ejemplo, en un centro comercial, evento o similar). La última entrada, Enable advertising ID, es la que activa tu ID de publicidad. Ese es un número único con el que se te identifica, a la hora de mostrarte anuncios que te resulten más relevantes

en función de tus gustos. Si desactivas el ID, las redes de publicidad lo tienen más difícil para saber quién eres (a menos que usen ‘fingerprinting’, ver recuadro de la página anterior). Esto no quiere decir que no verás anuncios, sino que los que aparecen serán al azar y no específicos para ti.

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Un poco más abajo, tienes las opciones relativas a Cortana y otras dos especialmente peliagudas. Si no utilizas Cortana para nada, puedes desactivar los dos reguladores superiores. La función de ‘telemetría’ se encarga de mantener informado a Microsoft de cómo funciona tu equipo y, además, envía todo tipo de detalles técnicos para ‘mejorar el sistema’. En cuanto al servicio de inventario, hace justo eso: llevar el control de todo el software que utilizas. Si no quieres que Microsoft se entere cada vez que instalas o actualizas algo, desactívala. 10

Y llegamos ya a la recta final. Los siguientes tres apartados son bastante autoexplicativos. Excepto el primero, que permite a las apps acceder a la información de la cuenta de Microsoft con la que has iniciado sesión, los demás se pueden activar o desactivar, según lo necesites. El peligro de dejar que cualquier aplicación acceda a los datos de tu cuenta de Microsoft es que, si has usado tu nombre real o una foto, te podrán identificar de inmediato. 11

Los reguladores Mensajes y Señales de radio deberían estar deshabilitados. El primero permite que las aplicaciones envíen SMS (si el dispositivo tiene una tarjeta SIM, por ejemplo) y el segundo es similar al que ya hemos visto para recibir información por Bluetooth. Sin embargo, en este caso se trata de información de cualquier tipo, no necesariamente anuncios. Así que, solo si vas a transmitir información por Bluetooth a un dispositivo móvil o electrónico, deberás activar esta opción.