otra forma de ver los videojuegos
Algunas películas y series de televisión han usado la industria de los videojuegos, o alguno de sus iconos, como piedra angular sobre la que construir historias propias vinculadas a ellos.
Al margen de las películas o las series televisivas basadas en una licencia concreta, es interesante destacar que también ha habido producciones que, de una manera u otra, están relacionadas con los videojuegos o los homenajean. En la última década, ha habido unos cuantos ejemplos de ello, a veces nacidos expresamente en dichos medios audiovisuales y otras veces como adaptaciones directas de obras gestadas en papel. La mejor encarnación de esta vertiente es, seguramente, Pixels, una película de imagen real protagonizada por Adam Sandler y que incluye referencias a clásicos de los salones recreativos ochenteros como Pac-Man, Donkey Kong, Space Invaders o Galaga. Y ya que nos referimos a arcades y a Donkey Kong, no se puede obviar ¡Rompe Ralph!, un filme de animación de Disney que estaba protagonizado por el villano de una máquina recreativa que, en un momento dado, se cansaba de ser el malo de la película o, más bien, del propio videojuego que había dentro de la película. Y lo mejor de todo es que en ella participaban villanos tan reconocibles como Bowser, el Doctor Robotnik o Bison. Hablando del enemigo final de Street Fighter II, nos vemos obligados también a postrarnos ante Hi-Score Girl, un manga adaptado a la televisión por Netflix que narra el triángulo amoroso entre tres adolescentes japoneses. La gracia está en que la relación entre ellos se forja a través de su pasión por las máquinas recreativas de los 90, en especial la de lucha de Capcom, en torno a la cual giran muchos de los capítulos. Y otra obra de amoríos adaptada desde un cómic que merece mención es Scott Pilgrim vs The World, cuya narrativa está planteada como la de un videojuego, con niveles progresivos y sus correspondientes jefes finales. De hecho, más tarde, se hizo también un juego.
Además, ha habido docudramas sobre los entresijos de la industria. Tal es el caso del filme The Gamechangers, basado en Rockstar y la creación de GTA, o Mythic Quest, una serie de Ubisoft que cuenta la vida de un grupo de desarrolladores de videojuegos.