Estilo florentino
Hace tres lustros que fundó su firma en la capital de la Toscana y el diseñador italiano terminará este año con 50 boutiques por todo el mundo. En España, suma a la de Ibiza una en Barcelona (Paseo de Gracia, 104).
Abajo, Sus colecciones lucen con orgullo el distintivo de calidad made in Italy. Este autodidacta, artífice del sport-couture –una forma de vestir relajada aunque elegante– encuentra ideas para sus creaciones en cualquier destino.
El deseo de descubrir y enfrentarse a una realidad diferente sin prejuicios.
Todas mis experiencias han sido una fuente de inspiración y entrenamiento, incluyendo las ciudades donde he pasado mucho tiempo, como París, Londres
y Nueva York. En la primera decidí dedicarme a la industria de la moda; en el Nueva York de los
80 tuve la oportunidad de conocer a iconos como Andy Warhol; por otro lado, los jóvenes londinenses expresan a la perfección el concepto de rock couture. Finalmente, Florencia, mi hogar.
Después de viajar tanto quise instalarme aquí, porque además de una gran belleza estética, tiene la mejor artesanía. Cada rincón cuenta una historia
de mi país y de la cultura italiana.
A menudo. Durante ellos es posible que me impacte una imagen, forma o color que, inmediatamente, se convierte
en el punto de partida de una colección.
En Florencia, la panorámica desde el Forte Belvedere. Un lugar mágico que ofrece una perspectiva única sobre el centro.
En el casco histórico se encuentra el Fuor d’Acqua: auténtico sabor del mar
al estilo tradicional florentino. Su atmósfera relajada y acogedora, aunque elegante al mismo tiempo, se combina a la perfección con la excelente calidad del pescado que llega cada día del mercado de Viareggio.
Mi hogar, con vistas a Florencia y rodeado de la naturaleza de la Toscana.