Entrevista
Una experiencia gourmet con el tres estrellas Michelin Quique Dacosta.
aQuique Dacosta no le gusta sonreír en las fotos, sin embargo es un hombre de trato cordial y divertido. Uno de esos genios que tienen el don de explicar sus obras al profano con la paciencia del maestro de escuela. De su Extremadura natal conserva un leve acento, la sobriedad de las tierras del interior y la pasión por algunos productos como el pimentón de la Vera. Todo lo demás es puro Mediterráneo, luminosidad, frescura, originalidad. Las tres estrellas Michelin que tiene desde hace cinco años han transformado su vida convirtiéndole en viajero empedernido. Constantemente ejerce de conferenciante en los mejores foros mundiales. Acude a los eventos más importantes para enseñar cocina y para seguir aprendiendo y colabora con los mejores chefs del planeta para compartir ideas y maneras.
En su casa, en Denia, Alicante, a la sombra del Parque Natural del Montgó, sueña con nuevos platos que se investigan en el pequeño laboratorio del restaurante Quique Dacosta. Desde allí intenta recuperar sabores de productos genéticamente desaparecidos, algo complicado porque sólo cuenta con la memoria gustativa de la gente que llegó a probarlos. Es la faceta técnica de un amante del arte, un fanático del flamenco, que impregna de ‘duende’ todos sus platos. La perfección estética de cada uno de sus dos menús degustación, Universo Local y DNA La Búsqueda, convierte la comida en una exposición pictórica. El precio del menú (199 euros) y la distancia hasta Denia están plenamente justificados por tener una experiencia gastronómica única.