Ana Polvorosa
Berlín, Málaga, Ámsterdam, Tel Aviv... Cazamos a la actriz ANA POLVOROSA entre ciudades para hablar del estreno de Pieles y del éxito de Las chicas del cable. La generación Netflix es atrevida y viajera.
Los viajes pendientes de una de Las chicas del cable.
Viajarás mucho por trabajo... Y por placer también, me encanta. Acabo de estar en Miami y me ha impactado. De La Habana me marcó el contraste de la belleza arquitectónica y su deterioro. Tengo muchas ganas de ir a Argentina, Japón y conocer más Estados Unidos. Acabas de estrenar Pieles en el cine. La película está teniendo una trayectoria increíble, en festivales como la Berlinale, Málaga, Ámsterdam, Tel Aviv... Seguro que va a marcar un antes y un después para el cine español. Su estética es muy definida y provocadora, aunque no persigue eso: trata de personas con un físico diferente y su lucha por llevar una vida normal. ¿Cómo estás viviendo el fenómeno de Las chicas del
cable, la primera serie hecha en España para Netflix? El rodaje ha sido parecido al de otras series, hemos empezado a ser conscientes de la repercusión después. Para las fotos de la campaña promocional vino el mismo fotógrafo que firmó las de Stranger things y Narcos, ¡qué fuerte! Ahí empezamos a ser conscientes del alcance, y no sólo en España. Recibimos mensajes de seguidores desde Brasil, Estados Unidos... Se está viendo en todo el mundo. ¿Qué te enorgullece más del proyecto? Que trate de historias interesantes de mujeres. Presenta muchas luchas, una de ellas la situación de la mujer en esa época, aunque algunas cosas se pueden extrapolar a la actualidad. Y cada día estoy más enamorada de Sara, mi personaje. ¿Te sientes partícipe de su discurso feminista? Todos deberíamos sentirnos identificados con la igualdad. Y es interesante hacer llegar estos hechos históricos a las nuevas generaciones. Si el mensaje cala, pues fenomenal. ¿Te resultó difícil rodar algunas escenas? La verdad es que no. Intento disfrutar y sacarle el punto divertido a todo. No quiero que nada sea un drama en mi vida. Tu anterior trabajo como ‘la Lore’, en la serie Aída, fue muy popular. ¿Fue complicado cambiar de registro? Siempre me he sentido capacitada para interpretar diferentes personajes y he tenido
“¿QUE SI ME ATRAEN LOS PROYECTOS TRANSGRESORES? ¡VIVIRÍA DE ESO TODA MI VIDA! ADORO LOS PAPELES QUE ME HACEN CRECER”
la suerte de poder hacerlo. Cuando estaba en Aída rodé Mentiras y gordas. Sí que es cierto que Las chicas del cable ha tenido más repercusión. ¿Qué tipo de viajera eres? Me encantaría ser más mochilera, pero no puedo. Me gusta saber dónde voy a dormir. El próximo viaje que haga quiero hacerlo sola. Me cuesta, porque soy un poco miedosa, pero es una experiencia que te hace evolucionar y crecer. ¿Qué sueles llevar en la maleta? Me llevo toda la casa. Mucha crema para el sol, ibuprofeno, Almax... [risas]. Y algún libro de Julia Navarro.