La vanguardia aterriza en estos barrios emergentes.
NØRREBRO COPENHAGUE DINAMARCA
Las ciudades evolucionan a un ritmo tan frenético que es difícil seguirles la pista a las áreas urbanas alternativas. Nosotros hemos cazado –y analizado– siete.
Hace una década ni siquiera la policía danesa estaba preparada para entrar en Nørrebro, el barrio más joven (el 70% es menor de 40 años), multicultural y políticamente activo de Copenhague. Una época bastante combativa de la que ya sólo queda el lema 2200 Nørrebronx de las camisetas por el ombligo de quienes ahora toman el
brunch en Café Auto (Griffenfeldsgade 22) o en Manfreds, situado en el número 40 de Jaegersborggade, la calle que vertebra el ideario del barrio y que únicamente deberás abandonar para degustar algún plato de comida callejera en Copenhagen Street Food. De vuelta a Jaegersborggade, en The Coffee Collective pide su blend más popular, el Espresso 2: un equilibrado y cremoso café con regusto a turrón y chocolate negro comprado directamente a productores de Colombia y Brasil. En el número 27 hazte con una pieza de porcelana blanca del estudio de Inge Vincents y en el 57 escoge cualquiera de las impresiones de CMYK kld. Porque sí, otro de los motivos para visitar Nørrebro es ir de shopping: ¿quizás un abrigo en Tricotage (Jaegersborggade 15) o en Acne Archive (Elmegade 21)? Aquí no esperes encontrar lujosas marcas internacionales, lo que se lleva –y todo el mundo lleva– es el estilo ‘provinciano’ danés, tal y como lo definen sus propios diseñadores, los mismos que exhiben sus prendas en revistas como Vogue.