El Melillero seguirá en prisión por el ataque de Cártama
El fiscal mantuvo en la vista de ayer la acusación de malos tratos a otra expareja
El fiscal mantuvo la acusación y la petición de condena para José Arcadio D.N. el Melillero -supuesto autor del ataque con ácido contra su exnovia y otra mujer en Cártama (Málaga)- por la presunta comisión de un delito de malos tratos contra su expareja y madre de su hijo. El juicio se celebró ayer a puerta cerrada en el Juzgado de lo Penal número 13 de Málaga y el acusado se enfrentaba inicialmente a una petición fiscal de dos años y medio de prisión y prohibición de acercarse a la víctima a una distancia inferior a 500 metros por malos tratos, amenazas graves y vejaciones injustas.
Por otra parte, ayer el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 3 de Málaga ratificó la prisión provisional y sin fianza de José Arcadio D.N. el Melillero, como supuesto autor del ataque con ácido en el que hirió de gravedad a su exnovia y la amiga de ésta el pasado 12 de enero en la localidad de Cártama. Fuentes judiciales aseguraron que el Melillero volvió a negar ser el autor de la agresión con ácido a su expareja y una amiga y repitió que nunca hubiera deseado algo así para ella, como ya dijo en los Juzgados de Fuengirola el 18 de enero.
Respecto al caso de su también expareja y madre de su hijo, el fiscal destacó, en su escrito acusatorio, que sobre las 5.00 horas del 14 de agosto de 2016 el acusado se encontró con la víctima en una discoteca de Marbella y tras pedirle explicaciones por el motivo de encontrarse allí se produjo una discusión. «Con ánimo de menoscabar su integridad física», la agredió, le dio un puñetazo en la cara y la tiró al suelo, donde la agarró por el pelo y la arrastró por los escalones de la discoteca.
Cuando la joven pudo escapar del acusado, éste la alcanzó y la arrojó sobre el capó de un vehículo donde le propinó puñetazos por todo el cuerpo, hasta que la mujer salió huyendo y se encontró con una patrulla de la Policía que la acompañó a un centro de salud. Días más tarde el acusado le pidió perdón por teléfono y le dijo que quería ver al hijo que tenían en común, pero ante la negativa de ella la volvió a llamar desde un número oculto, y la injurió y vejó. Debido a que no se le podía localizar para notificarle la fecha del juicio, el juez dictó una orden de busca y captura, aunque al estar actualmente en prisión fue conducido a la Ciudad de la Justicia de Málaga por la Guardia Civil.