ERC arrebata a Junts el liderazgo del ‘procés’
Aragonés quiere investirse con los secesionistas
ERC consiguió ayer vencer por primera vez en escaños y votos a la posconvergencia en unas elecciones al Parlament. En un contexto general, además, que los sitúa empatados en escaños con el PSC, eso sí, con 50.000 votos menos. ERC, por la mínima, como por los pelos fue su derrota ante Jxcat hace cuatro años, es la nueva referencia independentista. Un secesionismo que supera el 50% del voto y aumenta en cuatro sus escaños en el Parlamento. Por aquellas cosas de la ley d’hondt, los 50.000 votos de ventaja del PSC no se traducen en diferencia alguna en escaños. Y, de la misma manera, los 40.000 de ventaja de los republicanos hacia los posconvergentes determinan una sola acta de distancia, cuando, en el 2017, Jxcat logró dos con apenas una superioridad de 12.000 votos.
Curiosamente, los republicanos se quedaron a solo tres centésimas de reproducir el 21,38% del voto obtenido en el 2017, eso sí, gracias a la caída de la participación, contó en esta jornada con 344.000 votos menos.
Las llamadas a la movilización de ERC, y muy especialmente de su líder, Oriol Junqueras, hicieron finalmente mella en un electorado adormilado, según reconocían en plena campaña.
«El independentismo ha ganado. Y ha hecho historia superando el 50%. Se ha creado una fuerza inmensa a favor de la amnistía y la autodeterminación. Y yo emplazo a todas estas fuerzas, especialmente a la progresistas, a ponernos de acuerdo con un programa que permita» desencallar el procès», dijo Aragonés, que como Illa, pretende presentarse a la investidura.