Abengoa, abocada al concurso por insolvencia
Convoca de urgencia a su consejo después de fallar su refinanciación
Abengoa, la firma sevillana de ingeniería y energías alternativas se enfrenta al concurso por insolvencia al no haber logrado que los acreedores financieros otorguen los consentimientos solicitados con el fin de extender de nuevo el plazo para el cierre y ejecución del acuerdo de reestructuración, por lo que el consejo de administración de la compañía celebrará de «forma inmediata» una sesión en la que, «en cumplimiento de sus deberes fiduciarios, tomará las decisiones que le correspondan para proteger sus interese».
La compañía, que ha presentado este mismo mes de febrero sus cuentas correspondientes al 2019, consolidó ventas de 1.493 millones de euros y pérdidas de 541 millones. Igualmente en el 2019 su situación patrimonial era negativa y registraba fondos propios negativos de 3.707,45 millones de euros. Ese mismo ejercicio daba empleo a una plantilla de 14.399 trabajadores, 2.500 en España.
El secretario general del sindicato mayoritario UGT FICA Sevilla, Manuel Ponce, explicó ayer a Efe que Abengoa podría quedar en manos de un juez mercantil y, con ello, dar al traste con el plan de viabilidad para salvar la empresa, y censuró las trabas procedan de los accionistas minoritarios.
Abengoa, que está suspendida de cotización desde julio, está en causa de disolución desde el pasado 19 de mayo, al arrojar un patrimonio negativo de 388 millones de euros, y solicitó el preconcurso de acreedores a finales de agosto.
La compañía, presidida entonces por Gonzalo Urquijo, había alcanzado un acuerdo con la banca y el visto bueno del ICO, pero incluía la aportación de 20 millones de la Junta de Andalucía. Pero esta lo rechazó, alegando que no podía justificar una ayuda directa a una gran empresa.
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