Villafranca recupera a lo largo de los 20 últimos años su rico patrimonio local
Durante las dos últimas décadas el Ayuntamiento ha actuado en más de una decena de edificios públicos de interés cultural
Durante las dos últimas décadas, la recuperación del patrimonio histórico de Villafranca ha sido una realidad, suponiendo un buen aliciente para diversificar la oferta turística, que prácticamente se circunscribía al verano, con el reclamo del Aquasierra, y que poco a poco se ha ido desestacionalizando con la celebración de actividades, sobre todo deportivas. En el Guadalquivir ha tenido lugar una de las últimas mejoras, como ha sido la del Puente de Hierro. El Puente de Hierro ha sido una de las últimas actuaciones, donde la Diputación llevó a cabo durante el año 2019 su reforma integral, invirtiendo 120.000 euros. Otra de las mejoras llevadas a cabo fue la de la ermita de las Angustias. En el año 2006, el Ayuntamiento llevó a cabo la recuperación de esta ermita del siglo XVIII ubicada en el barrio de San José. En esta restauración se destinaron 75.000 euros, financiados por Ayuntamiento y Diputación. Por otro lado, el pasado mes de agosto se restauraron los tejados de la ermita, donde cofradías y ayuntamiento destinaron 6.000 euros.
En espacios públicos destaca la restauración de la Fuente de los Dos Caños, donde se han invertido 15.000 euros. Es la única que aún se conserva de las tres que se construyeron cuando se canalizó por primera vez el agua desde la sierra al pueblo. Los planos de la misma fueron aprobados por la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y, hoy día, constituye una buena muestra de fuente tradicional urbana de las construidas en el siglo XVIII en la provincia, tanto para abastecimiento a la población como abrevadero de caballerías. Esta fuente se compone de un pilar de planta rectangular, de 4x2 metros, y una altura de 60 centímetros, y está construida con losas de granito trabajadas con mortero. Otras actuaciones han sido la de la Plaza de San Miguel y la del triunfo de San Rafael.