Valoración desigual en el sector

La medida de Urbanismo ha sido recibida de forma dispar en el sector de la hostelería. El presidente de Hostecor, Francisco de la Torre, ve positivo este paso, que «facilita que compañeros inicien la actividad». Con ella, añade, «se le abre una puerta a los empresarios para rescatar de los erte a sus trabajadores y abre la posibilidad de trabajar con proveedores de cuarta y quinta gama, por lo que se puede ofrecer una carta en condiciones».

De la Torre recuerda que es una demanda que se llevaba pidiendo desde el verano pasado y que han reclamado, sobre todo, en la provincia. Aunque reconoce que aplicar una resolucompañeros. ción similar depende de cada Ayuntamiento, espera que el paso «sirva de ejemplo y lo puedan poner en práctica en la provincia». El presidente de Hostecor cree que en muy pocos casos se podrán poner veladores en la capital.

Para el responsable de ocio nocturno en Hostecor y empresario de dos establecimientos, Rubén Rivero, la medida «no sirve para nada» ya que el 99% de los negocios seguirán «igual de mal». Quizás en «zonas de playa» o en «pueblos» de la provincia pueda resultar útil, pero «a nadie le interesa» en la ciudad, lamenta. Esa es la conclusión que extrae tras comprobar el recibimiento de la normativa entre los Además, a los argumentos en contra suma que «es malo meter a gente en los interiores». Lo que echa en falta el sector -apunta- son las ayudas directas.

Desde el Long Rock confirman ese rechazo: «No vamos a abrir ahora, ni estamos preparados, ni nos dedicamos a la restauración», porque esta medida llega «tarde». Desde el local cordobés explican que la solicitaron en septiembre a Urbanismo, pero ahora no se dan las circunstancias propicias para desarrollar esa opción, al carecer de «cocina» o de «terraza». Solo esperan que esa decisión «no influya en las posibles ayudas que lleguen». I.L./M.L.

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