La madre de las menores de Tenerife cree que están «bien»
Anna, de un año, y Olivia, de seis años, desaparecieron el pasado martes en Tenerife junto con su padre, Tomás Gimeno, de 37 años, que advirtió a Beatriz Z. Z., su expareja, de que no volvería a verlas. Pese a ello, la mujer es optimista y subraya la necesidad de ponerse en lo mejor mientras el caso se dilucida. En un texto publicado ayer por COPE Canarias que recoge el diario El Día, la madre ha afirmado: «Mi mensaje es que manden mucha luz y amor a las niñas, que estoy segura que están bien. Que no miren las noticias alimentando la mala energía, que todo el mundo piense que las niñas son una bonita luz que están protegidas y que en cuanto menos lo esperemos estarán jugando y corriendo felices». Brigitte Z. Z. llama a la gente a que «tenga una emoción fuerte de que aparezcan y que den las gracias por adelantado, sintiendo de corazón que ya están con su madre».
Gimeno zarpó al mar en una embarcación que fue encontrada y en la que se hallaron restos de sangre que están siendo analizados. El hombre sacó 70.000 euros del banco, lo que ha llevado a manejar la hipótesis de que huyera, quizá cambiando de embarcación en alta mar. Mientras sigue la investigación sobre el caso, el juzgado de primera instancia número 3 de Güímar dictó el pasado sábado una orden internacional de búsqueda del hombre y de sus hijas.