Convivencia, música y juegos en el Distrito Sur
La clausura de las Jornadas por la Paz reúne a decenas de personas Varias actividades causan expectación en la zona
Alrededor de una treintena de ciclistas, mayores y pequeños, partió a las 12.00 horas de ayer de la bajada del Puente Romano mientras, al mismo tiempo, a un paseo andando, la fiesta comenzaba a girar en torno a la Plaza de la Unidad. Ambas actividades tenían un denominador común: la paz. A través de la cultura y el ocio, hasta una veintena de colectivos, instituciones y asociaciones convirtieron el Sector Sur en un escenario acogedor de integración y hermanamiento con motivo de la clausura de las 39ª
Jornadas por la Paz del Distrito Sur.
A ritmo de zumba, una plaza rodeada de expositores fue atrayendo, cerca del mediodía, a decenas de vecinos. La fiesta, incluso, se coló por las ventanas abiertas durante un día soleado y casi primaveral. Mientras los niños imitaban los bailes que, en un escenario al fondo, coreografiaban las monitoras, los padres, aprovisionados de bebidas, se entregaban a un día especial. El olor del arroz de la asociación La Mirada del Sur era el incentivo para quedarse allí durante horas.
Toda esa imagen entrañaba un fin nada trivial. La convivencia pretendida se manifestaba en las charlas, las risas y los juegos. Todo ello, acompañado por la valiosa información o los solidarios propósitos que las asociaciones ponían a disposición de la gente.
La clausura de las jornadas, coordinadas por el Consejo de Distrito Sur y el Ayuntamiento, se completó con diferentes actividades a lo largo del mediodía. Un cuentacuentos y una animación infantil entretuvieron a los más pequeños. La guitarra de Teresa Jiménez puso el acento flamenco a la jornada, que terminó cerrando la actuación Dale cuerda a tu corazón, por parte del conservatorio Músico Ziryab.