Paneles solares en comunidades de vecinos: todo son ventajas
El sol calienta para todos. También para las personas que viven en bloques de pisos y que, en España, son la mayoría. Damos respuesta a las dudas más frecuentes sobre la instalación de paneles solares de uso colectivo. Un ahorro en la factura de la luz pa
B. G.
Contrariamente a lo que se pueda pensar, los paneles solares no son sólo para las viviendas individuales. El sol, ese sol que en España nos regala entre 2.500 y 3.000 horas de luz al año, no brilla sólo para los habitantes de casas unifamiliares. España es un país de pisos: más de dos tercios de la población vive en bloques de viviendas, y ahí también pueden instalarse paneles solares para compartir la energía 100% limpia entre todos los vecinos y ahorrar hasta un 40% en el consumo de la luz.
1 ¿Se pueden poner paneles solares en bloques de pisos?
La respuesta ya la hemos adelantado: sí. Los tejados o las azoteas de los edificios pueden aprovecharse para poner en marcha un sistema de autoconsumo colectivo del que se pueden beneficiar todos los que viven bajo el mismo tejado. Un modelo que se irá imponiendo en los próximos años.
Según la Comisión Europea, los edificios son responsables del 36% de las emisiones de gases de efecto invernadero y del 40% del consumo de energía, debido en buena parte a que en nuestro continente, un 75% de los inmuebles no son energéticamente eficientes. Por eso, dando un paso más en su objetivo de convertir Europa en un territorio libre de emisiones para el año 2050, el Parlamento Europeo ha aprobado recientemente una reforma de la Directiva sobre Eficiencia Energética de los Edificios. Aunque aún no ha finalizado el proceso para su entrada en vigor, eso supondría que, con la fecha límite del 31 de diciembre de 2028, los Estados miembros tendrían que garantizar el despliegue de instalaciones de energía solar en todos los edificios residenciales.
2 ¿Qué ventajas tienen los paneles solares en tejados compartidos?
Tal y como está el precio de la luz hoy en día, probablemente el ahorro en la factura sea el argumento más convincente, pero no es la única ventaja. Hay más: desde subvenciones y a deducciones fiscales, a la revalorización de la vivienda e incluso ingresos extra por el excedente de energía producida que se vierta a la red eléctrica.
3 ¿Cuál es el primer paso?
Una comunidad de vecinos puede ahorrar en su factura de la luz a través de dos modalidades. En primer lugar puede ser la propia comunidad quien promueva la instalación de paneles solares en su azotea o tejado para generar energía para su uso en las zonas comunes del edificio y/o de las viviendas. Y otra alternativa, muy novedosa y que Iberdrola ofrece como solución es ceder la cubierta del edificio a Iberdrola para que genere energía verde y los vecinos que se encuentren a una distancia máxima de 2km puedan beneficiarse de esa energía renovable, este modelo se conoce como Comunidad Solar Iberdrola. No requiere ni inversión ni instalación por parte del cliente ya que Iberdrola se encarga de asumir todo el coste y el pago recurrente por el alquiler de la cubierta.
4 ¿Tienen que estar de acuerdo todos los vecinos?
La propuesta debe partir de uno de los propietarios, que deberá solicitar una junta de vecinos en la que tratar y votar la propuesta. El número de votos a favor depende de cuál sea el objetivo que se persiga con la instalación de los paneles solares:
* Si la intención es generar energía para cubrir el consumo eléctrico comunitario (ascensor, portal, escaleras, garaje y demás zonas comunes) será necesario el acuerdo de la mayoría simple de los propietarios, que represente también la mayoría simple de las cuotas de participación. Siempre y cuando, según se establece en la Ley de Propiedad Horizontal, «su coste repercutido anualmente, una vez descontadas las subvenciones o ayudas públicas y aplicada en su caso la financiación, no supere la cuantía de nueve mensualidades ordinarias de gastos comunes».
* Si se desea destinar la energía al uso privativo de las viviendas (es decir, al gasto de los vecinos en sus hogares particulares), hará falta «el voto a favor de un tercio de los integrantes de la comunidad que representen, a su vez, un tercio de las cuotas de participación». Esos vecinos deberán costear la instalación que será de su propiedad y sólo ellos (los que votaron a favor) se beneficiarán de este autoconsumo.
5 ¿Cuánto cuesta y cuándo se amortiza?
Los sistemas de paneles solares suponen una inversión inicial importante, pero se trata de una inversión con enormes tasas de rendimiento. El periodo de amortización del gasto oscila entre cuatro y seis años, según diversas variables, como los fabricantes de los paneles y componentes. Pero además de la vida útil de la instalación, intervienen otros factores. Un diseño del sistema solar ajustado a las necesidades energéticas de la comunidad de vecinos es el punto clave. En este proceso de diseño se deben tener en cuenta factores como el número de paneles que se pueden instalar para aprovechar de manera óptima la cubierta del inmueble, los patrones climáticos del lugar en el que se instalen y la demanda de energía. La ecuación es fácil: cuanto mayor sea el consumo mensual de electricidad, mayor será el ahorro potencial obtenido de la energía solar y menor el tiempo hasta alcanzar el punto de equilibrio solar.
Si la siguiente pregunta es cuánto costaría la instalación, se puede calcular el presupuesto escaneando este código QR: