Tributo a Edgar Allan Poe
La Cofradía de la Viña y el Vino nombra «embajador universal» a título póstumo al autor de ‘El barril de amontillado’ La célebre obra vio la luz por vez primera en 1846
El escritor y periodista estadounidense Edgar Allan Poe, uno de los maestros universales del relato corto, acaba de convertirse, a título póstumo, en «embajador universal del Amontillado». La Cofradía de la Viña y el Vino, un colectivo que, desde su fundación en 1990, ha demostrado su compromiso con la promoción y con la defensa de los vinos que se elaboran en la zona Montillamoriles, escenificó el singular nombramiento en la bodega de Casa Palop, un histórico edificio que se ubica en la calle Escuelas y que fue parte del conjunto arquitectónico del Colegio de los Jesuitas de Montilla entre los siglos XVI y XVIII.
El homenaje giró en torno a El barril de amontillado, el popular cuento de Edgar Allan Poe escrito en 1846, poco antes del inicio de su declive definitivo y tres años antes de su fallecimiento en extrañas circunstancias, a la edad de 40 años.
Ahora, el espíritu de Edgar Allan Poe descansa en una bota de Amontillado de la centenaria bodega situada en el sótano de Casa Palop. En este ambiente cargado de historia y de simbolismos tuvo lugar un acto del Gran Capítulo de la Cofradía de la Viña y el Vino, en el que se homenajeó al escritor nombrándolo «embajador universal del Amontillado», un tipo de vino así denominado universalmente «por evolucionar espontáneamente de la forma en que lo han hecho los vinos de Montilla, al
menos, tres siglos antes de que se reconociera y popularizara por parte de los bodegueros jerezanos», explicó el ingeniero agrónomo Luis Navarro García.
El acto contó con la asistencia de la mayoría de los cofrades, ataviados con su medalla y traje oscuro, actuando como maestro de ceremonias José Antonio Ponferrada, miembro de la Real Academia de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes de Córdoba.
Tras una bienvenida del ingeniero técnico agrícola Juan Portero, el ponente procedió a la lectura de los textos: una semblanza escrita por Rubén Darío de la vida y
obra de Poe; un fragmento de la obra The cask of amontillado y otro de la obra Glorias del Amontillado, cuya autoría corresponde a José Ponferrada Gómez y al propio José Antonio Ponferrada. A la vez, sonó la obra músical The cask of amontillado de Alan Parsons, como fondo de los pasajes.
Para concluir las lecturas intervino el escritor, historiador y bibliógrafo José Antonio Cerezo Aranda, que recordó que, en principio, «Poe fue enterrado sin lápida alguna, porque la que estaba dispuesta se malogró». Por eso, según detalló el director honorario de la Fundación Biblioteca Ma
nuel Ruiz Luque, «le colocaron un elemental bloque de arenisca con la escueta inscripción número 80 y así permaneció durante bastantes años».
Por este motivo, se procedió a presentar ante los asistentes un barril de Amontillado de más de cien años con la leyenda «80» y la indicación de la fecha y el número de arrobas que contiene, realizadas por el reconocido artista Antonio Martínez.
Un tonel de roble americano en el que, en adelante, el espíritu de Edgar Allan Poe descansará para siempre en recuerdo de su universal relato enológico.