El análisis de la calidad «va bien»
«Un poco de paciencia». Así se refirió ayer el presidente de la Diputación de Córdoba, Salvador Fuentes, a la situación del pantano de Sierra Boyera, prácticamente lleno tras las lluvias de Semana Santa cuando hace apenas unos meses estaba prácticamente seco.
El agua ya está en el pantano que sirve a la potabilizadora ubicada a sus pies, pero eso no significa que pueda usarse de inmediato. Primero es necesario realizar los análisis sanitarios y de calidad del agua pertinentes, para comprobar que todo está dentro de los niveles mínimamente aceptables. Y eso lleva su tiempo y protocolos, según explicó ayer Fuentes.
«Nadie tiene más prisa» por beber el agua de Sierra Boyera que «quienes llevan un año padeciendo los grifos sin agua», dijo el presidente de la institución. Sí avanzó que «la analítica va bien» aunque no quiso comprometer ninguna fecha concreta para saber cuándo volverá a correr el agua potable por los grifos.
Esos análisis de laboratorio se hacen a diario, según el responsable de la entidad, desde que el embalse comenzó a llenarse. Fuentes prometió que «en el momento en que tengamos la garantía protocolaria de que el agua es apta para el consumo, lo vamos a hacer».
Las muestras para el laboratorio se hacen a diario, según el responsable de la entidad
VACIAR LAS TUBERÍAS Además de esperar a los análisis de la calidad del agua, Emproacsa (la empresa de aguas de la Diputación) tiene que proceder al vaciado de las tuberías y conducciones por las que ahora mismo circula agua que no se puede beber. Es la que procede de La Colada y que se trata en la estación de Sierra Boyera de modo que pueda usarse al menos para otros menesteres.