“LOS ATAJOS NO SON BUENOS”

Lleva 25 a–os creando cosmŽticos de calidad * MARÍA UNCETABARRENECHEA cree en la excelencia y las cosas bien hechas.

Estudiando Farmacia se interesó por los principios activos de las plantas y los beneficios que estos podrían tener sobre la piel. Con el convencimiento de que algún día tendría sus propios laboratorios en Vitoria, María Unceta-Barrenechea (Bilbao, 1964) continuó formándose en dermatología. Más tarde creó la marca María D’uol, cuyos productos se idean, desarrollan y fabrican en España. Veinticinco años después, sus tratamientos están presentes en más de 600 centros estéticos de nuestro país.

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¿Cómo fueron los inicios?

Fundar una empresa en el año 1992 en el País Vasco no fue fácil. Era un momento político complicado debido al terrorismo, y ser empresaria en el sector industrial no era lo normal. Pero lo logré con pasión por lo que hacía, esfuerzo y perseverancia. Empecé sola y ahora tengo un equipo maravilloso, formado por mujeres que comparten mis valores.

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¿Qué consejo darías a las jóvenes?

No dejes de soñar y, si tienes un proyecto, desarróllalo. Actualmente hay muchas emprendedoras de éxito, asociaciones y organismos públicos que te pueden ayudar, así que infórmate. Pero, sobre todo, haz aquello que te haga estar en paz contigo misma. Aunque te limite el crecimiento o pierdas una gran oportunidad, lo más preciado que tienes es la libertad de poder elegir y hacer las cosas que te permitan dormir sin remordimientos.

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¿Qué lección has aprendido?

Uno de los grandes errores que cometemos es pensar que todo se soluciona de un día para otro y que los éxitos se consiguen enseguida. No es así. Las cosas necesitan tiempo y un aprendizaje previo. Hay que ver cada error como una oportunidad y no como un fracaso. En María D’uol nos gusta promover que no todo vale y los atajos no son buenos. Es decir, hay cosas que no salen a la primera, pero cada paso que das tiene su momento y hay que estar preparado para ello. Tener paciencia es necesario. Somos una empresa consolidada en fase de expansión internacional. Quizás la evolución haya sido más lenta de lo normal, pero así lo he elegido.

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¿Cuál es la clave para ser una buena jefa? ¿De qué te sirve decir a los demás cómo deben trabajar si tú no predicas con el ejemplo? Tienes que ser coherente en ese sentido. Me gusta transmitir a mis empleadas actitud positiva y espíritu de colaboración entre ellas. Mi equipo tiene un fuerte sentido de la impecabilidad. Queremos hacer las cosas lo mejor que sabemos.

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¿Qué es lo mejor de tu trabajo?

Poder ayudar a los demás. También el haber desarrollado la línea Oncology para prevenir y aliviar los efectos del tratamiento contra el cáncer sobre la piel. Eso me ha marcado.