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VARIOS ESTUDIOS MUESTRAN QUE EL 30% DE LAS CHICAS SE MASTURBA INCLUSO AUNQUE TENGA PAREJA

Mi novio siempre llega al orgasmo antes que yo. ¿Soy demasiado lenta?

«No es que las mujeres tarden más, sino que empiezan a excitarse después que los hombres», comenta la psicóloga y sexóloga Ana Lombardía (www.sexoenlapiel.com), formadora en los talleres de la tienda erótica Los Placeres de Lola. Como explica, «cuando se inicia el intercambio amoroso, ellos ya están a punto porque suelen llevar un rato pensando en ese momento, mientras que nosotras no. Por eso necesitamos un tiempo para estar al mismo nivel». Revelador.

A mi chico le gusta llamarme cosas muy fuertes cuando practicamos sexo. ¿Es normal?

Resulta muy habitual que en las películas pornográfcas actuales aparezcan escenas en las que el hombre se dirige a la mujer con términos agresivos o dominantes, así que puede que la intención de tu novio sea sólo eso, emular este tipo de imágenes. Utilizar un lenguaje soez no es algo malo en sí mismo (piensa que muchas personas también encuentran desagradable usar palabras de alto voltaje), así que sólo te corresponde a ti decidir cómo te hace sentir. Si te molesta, házselo saber en frío y dale un ejemplo de las palabras que más te ponen. Establece el tono y él te seguirá. Los chicos quieren que las chicas disfruten en la cama, así que una vez que sepa que no te gusta su forma de hablar parará... o al menos eso debería hacer.

¿Es raro masturbarse cuando estás saliendo con alguien?

Por supuesto que no. «La sexualidad es muy amplia y podemos disfrutarla tanto en pareja como en solitario», afrma Ana Lombardía. Además, como cuenta Mentxu Abril Elissalt, psicóloga de pareja y sexóloga, «antes de nada, plantéate: igual que no dejas de comer cuando tienes pareja, ¿por qué vas a parar de hacer lo otro? Ambas son necesidades. Se nos ha inculcado, debido a los ideales del amor romántico, que si estamos con un chico no necesitamos tocarnos, porque ya nos satisface él. Incluso que si lo hacemos es porque nos va mal con nuestra pareja. Eso es machismo. En realidad, es una forma de tener espacio para ti, de darte placer sin tener que depender de nadie».

Él quiere que practiquemos sexo anal, pero me da miedo que me duela. ¿Cuál es el mejor modo de iniciarse?

Lo primordial es que a ti también te apetezca. «Si lo haces por complacer a tu chico o por temor a que te abandone, puede que te duela», dice Lombardía. Partiendo de esta premisa, si estás decidida, esta sexóloga recomienda «empezar poco a poco: con un dedo o un dildo pequeño, después con dos... e ir aumentando el tamaño de lo que introducimos por el ano. Es imprescindible usar lubricantes, porque las paredes de esta zona son muy duras y los capilares se rompen con facilidad. Y también el preservativo para evitar infecciones, incluso aunque tengas un rollo estable».

Mis orgasmos son más fuertes cuando estoy con la regla. ¿Por qué?

«La razón es que se produce más prostaglandina, una hormona que provoca que el útero se contraiga y que, por tanto, el clímax sea más potente», según indica Lauren Streicher, profesora de Ginecología de la Feinberg School of Medicine de Chicago (EE UU). Pero, además, se ha comprobado que también se siente más placer durante la ovulación, ya que el clítoris aumenta de tamaño en un 20% y los genitales tienen un mayor fujo sanguíneo. Ya lo sabes...

Entonces, ¿todos mis amigos quieren tener sexo conmigo?

Diversos estudios indican que ¡seguramente! En una investigación publicada por la revista Evolutionary

Psychological Science, los hombres describieron a sus amigas como «alguien del sexo opuesto que me gusta y con quien no me importaría enrollarme». Las mujeres, en cambio, se refrieron a sus colegas masculinos como «amigos del sexo contrario». La autora de dicho experimento, April Bleske-Recheck, profesora de Psicología de la Universidad de Wisconsin (EE UU), sentencia: «Si es heterosexual, es probable que sienta cierta atracción física por ti». Eso no signifca que únicamente piense en acostarse contigo, ni que tú tengas vía libre para manejar sus sentimientos. Sólo que podéis retozar de vez en cuando si ambos estáis de acuerdo.

¿Qué hago si el preservativo se me queda dentro?

La sexóloga Ana Lombardía recomienda seguir estas pautas: si una parte del condón está fuera, tira con suavidad hasta retirarlo por completo. En caso contrario, introduce los dedos con cuidado para alcanzarlo (nunca metas ningún objeto para ayudarte, porque podrías dañar la vagina o el ano). Para facilitar la extracción, ponte en cuclillas y mantén la zona lo más relajada posible. Si ha habido eyaculación, trata de evitar que el semen se salga y valora tomar la píldora del día después, ya que hay riesgo de embarazo. También hay peligro de contagio de enfermedades de transmisión sexual, por lo que deberías realizarte unos análisis. Avisada quedas.

¿De verdad puedo contraer algún tipo de infección si realizo o me hacen sexo oral?

«Sí. Con cualquier práctica sexual en la que los fuidos corporales como la sangre, el semen, el líquido preseminal o el fujo vaginal entran en contacto con la boca, hay posibilidades. De hecho, la mayor fuente de transmisión del virus del sida es el sexo oral», responde Lombardía. Para protegerte, cuando hagas una felación a tu chico pídele que se ponga un preservativo. Y si él te realiza un cunnilingus, la mejor opción son los cuadrantes, una especie de pañuelos de látex que colocas sobre tu vulva. Quizá algo incómodos, pero muy efectivos.

Tengo fantasías sexuales con chicas. ¿Soy lesbiana?

Antes de nada, debes saber que no eres la única. Según la agencia de marketing Becom1, el 19% de las chicas fantasea con relaciones lésbicas, pero no por ello se pueden considerar homosexuales. De hecho, «las fantasías no defnen la orientación sexual», aclara la psicóloga Mentxu Abril Elissalt. «Son un mecanismo de liberación y desahogo mediante el cual llevamos a cabo acciones que no ponemos en práctica en la vida real. Si, además, es algo prohibido o mal visto por el tipo de educación que hemos tenido (suele suceder con la homosexualidad), se convierte en algo morboso», dice. Así lo refrenda una encuesta de la Universidad de Montreal (Canadá), que ha comprobado que el 60% de las mujeres coincide en que imaginarse una práctica tabú resulta muy, pero que muy estimulante.

¿El ‘sexting’ cuenta como preliminares?

¡Claro! Lo mejor de los juegos previos es que no tienen por qué suceder en la cama. «Intercambiar fotos y mensajes de texto de alto voltaje a través del móvil es una forma ideal de calentar el terreno de una manera muy divertida, porque la gente se desinhibe», afrma Rob Weisskirch, profesor de Evolución Humana de la Universidad de California (EE UU). ¿Te da corte? Piensa que incluso un «no puedo esperar a verte hoy» puede encender la llama.

¿Si hago el amor antes de ir al gimnasio me quedaré sin energía?

Depende. Si tu entrenamiento entre sábanas tiene lugar dos horas antes o menos, olvídate del gym porque tus pilas estarán al mínimo, según revela un estudio publicado en la revista Frontiers in Physiology. Si lo haces con más antelación, te benefciará: el sexo puede actuar como un precalentamiento, mejorar tu fexibilidad y darte un subidón, porque liberas endorfnas.

Mi relación pasa por una época de sequía. ¿Cómo lo solucionamos?

Primero hay que identifcar la causa. Como señala Ana Lombardía, «la ausencia de deseo surge cuando hay problemas en la relación –discusiones, celos, falta de comunicación...–, pero también puede deberse a una falta de autoestima: si no estás a gusto contigo misma, no te apetecerá tener sexo». ¿Las claves para resolverlo? «Resultan muy útiles las técnicas de focalización sensorial, que consisten en estimular todo el cuerpo (sola o en compañía) sin exigencias ni expectativas (aquí el coito no es la meta)», indica Mentxu Abril Elissalt. Algunas sugerencias: date un masaje o, mucho mejor, deja que te lo dé tu chico con un aceite sensual, regalaos una buena sesión de abrazos, caricias y besos, y déjate llevar. ¡La chispa saltará!