Schlimmes bahnt sich an
Die afrikanischen Immigranten, die im Umfeld ländlicher Anbaugebiete in prekären Behausungen ein menschenunwürdiges Dasein fristen, sind zusammen mit den Obdachlosen vielleicht die schwächsten Glieder der Gesellschaft. Mit der sich erst anbahnenden Coronavirus-Krise werden sich ihrem Elend aber noch weitere Bevölkerungskreise annähern. Es werden viele in extreme Notlagen geraten, die es sich nie vorgestellt haben. Zumal die hohe Arbeitslosigkeit in Spanien seit eh und je mit Schwarzarbeit und Gelegenheitsjobs abgemildert wurde. Jobs, die jetzt, da zumeist im Dienstleistungssektor, größtenteils nicht mehr existieren. Bei allem guten Willen der Regierung, niemanden zurückzulassen, wird es immer Randgruppen geben, die am Ende durch das soziale Raster fallen. So viel Geld wie der Staat in Sozialleistungen stecken müsste, wird er nicht aufbringen können. Schon jetzt sind etwa die versprochenen Zahlungen für die von einer Arbeitssausstellung Betroffenen stark in Verzug geraten.
Mal no, peor
Los inmigrantes africanos, que malviven en condiciones inhumanas en entornos agrícolas en chabolas, seguramente son, junto a las personas sin hogar, el último eslabón de nuestra sociedad actual. Sin embargo, con la crisis provocada por el coronavirus, que apenas empieza a mostrar la gravedad que podrá llegar a adquirir, más sectores de la población se aproximarán a esos niveles de miseria. Caerá en la pobreza extrema mucha gente que jamás se lo habría imaginado. Sobre todo porque el alto nivel de paro estructural en el país desde siempre se había amortiguado gracias a los trabajos sumergidos en el mercado negro. Trabajos, que sobre todo se realizaban en el sector servicios, donde ahora más empleo se está destruyendo. A pesar de toda la buena voluntad del gobierno de no querer dejar a nadie atrás, habrá mucha gente que se quedará sin cobertura alguna. El estado no va poder juntar tanto dinero para invertir en medidas sociales. Ahora mismo ya se están atrasando mucho los pagos prometidos a todos los afectados de los Ertes.