Zeit für Wellenbrecher
Man möchte sich gar nicht ausrechnen, wie viel Geld in den vergangenen Jahren buchstäblich in den Sand gesetzt wurde, um die Strände in Marbella und anderen Gemeinden nach Unwettern wieder herzustellen. Die Sandaufschüttungen dürften ein Vermögen gekostet haben. Dass Wellenbrecher Abhilfe schaffen können, ist bekannt, doch immer wieder zögerte die Zentralregierung Projekte für neue Installationen hinaus. Dass es Marbella, das nach den jüngsten Stürmen am stärksten betroffen war, nun zu bunt wird, ist allzu verständlich. Schließlich sind die Strände das Aushängeschild der Tourismushochburg. Auf das Angebot einer Vorfinanzierung durch Marbellas Stadtverwaltung nicht einzugehen, wäre von der Zentralregierung grob fahrlässig.
Hora para espigones
No es agradable hacer un cálculo de cuánto dinero, en el sentido literal de la palabra, se ha tirado al mar para sanear las playas tanto de Marbella como de otros otros municipios de la Costa después de las tormentas. Las aportaciones de arena deben haber costado una fortuna. Es bien sabido que los espigones pueden ser una solucion para el problema, pero una y otra vez el gobierno central ha retrasado los proyectos para nuevas instalaciones. Es fácil de entender que en Marbella, que ha sido uno de los municipios más afectados, esten hartos de esta situación. Porque precisamente las playas son la carta de presentación para esta ciudad turística. Sería muy negligente por parte del gobierno central no aceptar una propuesta de prefinanciación por parte del Ayuntamiento de Marbella.