¡San Fernando!
Tras la prórroga, el guardameta detuvo dos penaltis y corrigió el fallo de Corpas en la tanda (5-4) para llevar a los rojiblancos a la siguiente fase
Definitivamente este Almería nota sobremanera cuando Samú Costa y Mano Morlanes no están sobre el césped. El equipo mantiene innegociable el compromiso, pero pierde un abismo en toque y profundidad, lo que redunda en ser más previsible y desempeñarse a un menor ritmo de juego, algo que beneficia a rivales como Osasuna, más dispuestos al contragolpe, la segunda jugada y aprovechar el balón parado.
Con esas premisas los de Jagoba Arrasate llevaron la voz cantante en la primera mitad ante un conjunto rojiblanco en el que José Gomes volvió a confiar en la unidad B, reforzada con algún titular como Akieme y otros intermitentes, casos de Lazo y Villalba. A los visitantes le bastaron un par de saques de esquina para meter el miedo en el cuerpo a Fernando, que reaccionó con los reflejos que acostumbra.
Primero fue a un cabezazo en el segundo palo de David García metiendo una manopla salvadora. La acción derivó en un nuevo córner que tuvo a los mismos protagonistas: cabezazo de David García y nuevo paradón de Fernando, con el añadido de que el rechace esta vez volvía a cabecearlo Enric Gallego, con la fortuna de que Juan Villar sacaba un gol cantado bajo palos.
Con el Almería muy incómodo en la salida de balón pese a incrustar a De la Hoz como central junto a Chumi y sin que Robertone ni Villalba cobrasen el necesario protagonismo en la circulación del esférico, los locales se encomendaron a los chispazos de Lazo y Appiah por bandas. El extremo gaditano realizó el primer disparo a puerta superado el ecuador del primer acto, siendo repelido por la zaga local. El inglés, por su parte, dejaba toques de calidad con sendas bibicletas para zafarse de dos adversarios en una incursión por su banda que moría al interceptar su pase atrás la defensa pamplonica.
El panorama pedía sustituciones a gritos, pero José Gomes no movió ficha tras el descanso, de hecho no lo hizo hasta bien pasada la hora de partido, cuando Arrasate ya había introducido a tres efectivos de refuerzo. Mientras tanto, la segunda mitad se desarrolló en idénticos parámetros de la primera, con un Osasuna más cómodo sobre el terreno de juego ante la falta de profundidad y del característico fútbol asociativo de los rojiblancos.
Las entradas de Sadiq y Ramazani por Villar y Appiah le aportaron electricidad a los rojiblancos. En el primer balón que tocaba el nigeriano forzaba una amarilla para Nacho Vidal, pero no se entendió tanto que el técnico luso retirase al extremo inglés cuando estaba siendo uno de los más destacados del partido, mientras Lazo pasaba sin pena ni gloria. Los recambios reactivaron algo el encuentro, pero sin ocasiones claras hasta que a falta de dos minutos para el final Villalba desperdiciaba una ocasión de oro para establecer el 0-1 en una buena dejada atrás de Sadiq tras recibir una buena asistencia de Ramazani que el valenciano no remataba bien.
El partido estaba condenado a la prórroga desde el saque inicial y eso ocurrió tras 90 minutos en los que el Osasuna llevó mayor peligro a balón parado y el Almería solo contó con la ocasión de Villalba para desequilibrar el marcador. El primer tiempo de añadido apenas dio para un desborde por banda de Akieme con centro envenenado al corazón del área al que no llegaba por poco Corpas y un cabezazo de Calleri tras falta botada por Roberto Torres que Fernando detenía sin problemas.
Gomes agotó sus balas dando entrada como refresco a Ivanildo y Carvalho en la segunda parte de
José Gomes
Técnico de la UD Almería
la prórroga por los desgastados Villalba y Petrovic, pero nada cambió el escenario durante los últimos 15 minutos de juego, si bien ocurrió casi más que en todo el partido. Calleri tuvo dos ocasiones y Sadiq otra. En el 115’ tras controlar con el pecho un balón mal medido por Ivanildo y plantarse ante Fernando el derechazo del argentino se iba a las nubes y en el 118’ una chilena de espaldas también se le marchaba alta. El nigeriano, ya en la prolongación de la prórroga, recibía un buen pase en profundidad de Samú, pero Juan Pérez salía atento para evitar que le picase el esférico.
En la lotería de los penaltis emergió la figura de Fernando, que detuvo los lanzamientos de David García y Manu Sánchez para dejar sin efecto el fallo previo de su compañero Corpas, uno de los mayores especialistas del equipo desde el punto de penalti. El Almería estará en el sorteo el viernes en la ronda de cuartos de final con Barcelona, Betis, Sevilla, Levante y Villarreal, a la espera de que hoy se concreten los dos últimos equipos.
Venga quien venga ahora será un rival muy fuerte y complicado, no hay duda sobre ello”