Aplazan al martes el juicio de la caja B del PP por el contagio de un acusado
● El fiscal ve “prematuro” pronunciarse sobre el careo con Rajoy que pide Bárcenas ● Enrique López niega negociaciones con el ex tesorero
El tribunal que juzga la caja B del PP ha aplazado al martes el comienzo de la declaración de los acusados, entre los que figura Luis Bárcenas; para dar tiempo a uno de ellos, Cristóbal Páez, a recuperarse y cumplir con la preceptiva cuarentena tras haber dado la semana pasada positivo en Covid.
Así lo anunció ayer el presidente del tribunal, José Antonio Mora, que precisó que el juicio se reanudará el próximo martes, siempre y cuando haya mejorado el estado de salud de Páez, ex gerente del PP que se enfrenta a una petición del fiscal de 18 meses de cárcel.
El aplazamiento evitará que Luis Bárcenas declare ante el tribunal en plena campaña de las elecciones catalanas que se celebran el próximo domingo y el efecto que su declaración podría haber tenido en las expectativas electorales del PP.
En esta segunda jornada del juicio, el abogado del PP, Jesús Santos, atraía el foco mediático por la información que publicaban El Mundo y El Confidencial sobre sus reuniones con Bárcenas propiciadas por el ex magistrado de la Audiencia Nacional Enrique López, actual responsable de Justicia en la dirección del partido.
Una información sobre la que, Gonzalo Boye, abogado defensor de Carles Puigdemont y que en este juicio representa a la asociación DESC-Observatorio de Derechos Humanos, dijo, en su réplica a la alegaciones de las defensas, que tendría que abrirse una vía de investigación.
Santos eludió hacer declaraciones sobre este asunto, mientras que Enrique López negó cualquier negociación con Bárcenas, aunque admitió que puso a un empresario en contacto con él, una versión que avaló el presidente del PP, Pablo Casado, que se declaró ayer “harto” de este caso.
En el juicio, el fiscal Antonio Romeral, en respuesta a las cuestiones previas de las defensas, consideró “prematuro” pronunciarse sobre el careo propuesto por el abogado de Bárcenas, Gustavo Galán, entre su cliente y el ex presidente del Gobierno Mariano Rajoy, que está citado como testigo.
Para acordarlo, puntualizó, el tribunal debe además determinar si las contradicciones entre ambos afectan al objeto de enjuiciamiento y “no a otros hechos distintos”.
En cuanto a los nuevos testigos solicitados por Galán –los periodistas Francisco Mercado, Eduardo Inda, Ernesto Ekaizer y Marisa Gallero–, recordó que un testigo es el que tiene “un conocimiento directo de los hechos” y es así como entiende que hay que valorar esta propuesta.
A su juicio, la investigación periodística no determina ser testigo directo y no se han aportado los elementos empleados por esos testigos para poder probar los hechos.
En concreto, la grabación que presuntamente le hizo Francisco Mercado al predecesor de Bárcenas en la Tesorería del PP, el fallecido Álvaro Lapuerta, y en la que supuestamente reconocía que existían pagos a ex dirigentes del PP extraídos de la caja B.
Esto mismo señalaron la mayor parte de las seis acusaciones populares personadas en esta causa, que reprochan a la defensa de Bárcenas que no haya aportado esa grabación y llame a los periodistas a declarar sobre un asunto del que no serían testigos directos y estando además sujetos al secreto profesional.
Una de estas acusaciones, ADADE, defendió firmemente el careo, recordando su abogado, Mariano Benítez de Lugo, que él ya lo pidió sin éxito en el macrojuicio de Gürtel que le valió a Bárcenas una condena de 29 años de cárcel.
La vista se reanudaría el martes si el ex gerente del PP ya se hubiera restablecido