Diario de Almeria

3.000 MENOS

-

SUPONGO que mucha gente se encogerá de hombros al enterarse de la noticia de que el Corte Inglés va a reducir su plantilla en unos 3.000 empleados. “Bueno, sí, ¿y qué?”, se dirán. En tiempos de Covid todos nos hemos vuelto egoístas y procuramos escurrir el bulto ante las noticias adversas. Y mientras no nos afecte directamen­te, procuramos no prestar demasiada atención a la mala suerte que están viviendo los demás. Pero nadie puede sentirse a salvo cuando se produce una noticia así. Si una empresa que antes parecía sólida está pasando tantos apuros, pode

mos imaginar lo que están pasando las empresas mucho menos prestigios­as o mucho menos rentables. Es cierto que Amazon y el comercio electrónic­o le habían hecho mucho daño a los grandes almacenes, pero para algunos de nosotros saber que el Corte Inglés seguía funcionand­o era una garantía de que el mundo seguía en su sitio. Hace muchos años, en un Corte Inglés, vi las primeras escaleras mecánicas que había visto en mi vida. Estuve subiendo y bajando como loco hasta que un empleado me tuvo que llamar la atención. “Niño, bájate de ahí, que molestas al público”. Hoy en día nadie se fija ya en estas cosas. Las damos por supuestas, las damos por insustitui­bles, hasta que un buen dejan de serlo. Y de pronto, alehop, ya han desapareci­do de nuestra vista.

¿Quién va a pagar todas estas jubilacion­es anticipada­s y todos estos ERTE, si la Seguridad Social está prácticame­nte en quiebra? ¿Quién va a evitar que miles de empresas se vayan al garete? En general, las empresas tienen mala fama en España. Las asociamos con la explotació­n económica y el maltrato a los trabajador­es, pero hasta los pár vulos deberían saber que el Estado del Bienestar –que es muy difícil de mantener– sólo se puede financiar si hay miles de empresas que producen beneficios y pagan impuestos. De lo contrario no hay Estado del Bienestar que pueda seguir en pie, a pesar de que la especialid­ad hispánica es el profesor universita­rio –de Sociología, de Antropolog­ía, de Derecho Constituci­onal y sobre todo de Economía– que dedica su larga y apacible vida a explicarle­s a sus alumnos que todas las empresas son artilugios psicopátic­os creados por el capitalism­o para destruir a la especie humana. Conozco algunos de estos profesores, que encima tienen fama de sabios.

Vienen malos tiempos. Muy malos tiempos.

El Estado del Bienestar sólo se puede financiar si hay miles de empresas que producen beneficios y pagan impuestos

 ?? EDUARDO JORDÁ ??
EDUARDO JORDÁ

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain