Moncloa desvincula la regularización de la posibilidad de que vuelva a España
● Calvo asegura que el pago de la deuda “no tiene nada que ver” con un regreso de los Emiratos Árabes
La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, aseguró ayer que la regularización fiscal por rentas no declaradas durante varios ejercicios realizada por el rey emérito Juan Carlos I “no tiene nada que ver” como primer paso para un posible regreso al país desde Emiratos Árabes Unidos, donde se encuentra el Monarca.
En declaraciones a los periodistas en Córdoba, Calvo aclaró que “el Rey emérito está fuera por una decisión que conocimos todos los españoles, porque se la trasladó al Rey Felipe VI mediante una carta que todos pudimos conocer públicamente”.
Por tanto, remarcó que “no tiene nada que ver con que esté cumpliendo con sus obligaciones tributarias, que forman parte del rigor de una democracia como la nuestra, donde nadie puede incumplirlas, independientemente de lo que eso desde el punto de vista de la opinión ética o política pueda significar libremente para cualquiera de nosotros en el comentario que considere oportuno hacer”, que “es también una situación paralela”, apostilló.
A juicio de Calvo, “hay un puestos o años no prescritos, que ahora serán analizadas para garantizar que la información es “veraz y completa”. En caso de que se demostrara que la regularización no es veraz y completa, el importe abonado se consideraría pagado a cuenta de futuras responsabilidades penales y tributarias. En esta ocasión, los técnicos de Hacienda tienen “dudas” sobre los hechos regularizados, por lo que instan a la Agencia Tributaria a abrir una investigación “como haría con cualquier contribuyente” para evitar incurrir en “dejación de funciones”. mensaje importante, y es que en nuestro país todos tenemos que cumplir las normas”, al tiempo que señaló que “en las relaciones directamente personales que cada ciudadano español, incluido quien ha sido jefe del Estado a título de Rey, el Gobierno no tiene que inmiscuirse, porque forma parte de las relaciones y de la garantía del Estado de Derecho para que cada quien cumpla con sus obligaciones, en este caso con sus obligaciones fiscales”, que “es lo que está ocurriendo”.
Además, subrayó que ello “da la prueba más que fehaciente del riguroso Estado y la rigurosa democracia en la que vivimos, donde todos somos iguales y todos tenemos que cumplir con nuestros deberes legales, en este caso fiscales”.
El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, afirmó ayer en Logroño que la ley está “para todos los españoles por igual” y que, por tanto, “todos estamos sujetos al cumplimiento de las obligaciones”.
Ábalos también se refirió al mensaje del vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, quien cuestionó a través de un tuit a los que aplaudieron la figura del Rey emérito Juan Carlos I tras el acto conmemorativo del intento fallido del golpe de estado del 23-F. “No soy partidario de las causas generales, todo tiene su virtud y su defecto y hay actos reprochables y otros que hay que valorar positivamente”, afirmó Ábalos.
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, insistió igualmente en su mensaje de que la ley es igual para todos, incluido el Rey emérito, y aprovechó su ref lexión para hacer un reconocimiento expreso a la figura del rey Felipe VI como “símbolo” de la unidad de España.