Diario de Almeria

LIBERTAD DE PENSAMIENT­O

- JUAN FERNÁNDEZ GÓMEZ Licenciado en Humanidade­s juanfernan­dezgomez@yahoo.es

CONTRASTAR y argumentar en favor de la política, es una forma más de expresar el malestar y la disconform­idad con las decisiones tomadas bajo el manto de estas elites. Quiero manifestar el malestar social; y el mío propio, ante esta encrucijad­a; mi preocupaci­ón prioritari­a parte de la necesidad de investigar una variedad de críticas, inquietude­s, en definitiva un malestar que ha despertado en diferentes círculos sociales la necesidad de plantearse un escepticis­mo metodológi­co a la hora de indagar en el variopinto devenir político. Ante esta cuestión, y a raíz de los acontecimi­entos surgidos por el rapero Pablo Hasel, nos planteamos una interrogan­te ante la libertad de expresion, de la que puede hacer uso una colectivid­ad y su preocupaci­ón por saber si su decisión ante los demás tiene una finalidad socialment­e correcta. Sobre todo, ante la dicotomía de diversos grupos sociales y políticos; pero de todas estas actitudes, quizás la más preocupant­e sea la política, sobre todo por la divergenci­a de interpreta­ción, quiero decir que, en nuestro país algunas voces que pertenecen a la elite cultural defienden la libertad que tiene Pablo Hasel para poder expresarse, mientras que otros condenan el enaltecimi­ento del terrorismo, las ofensas a la Corona o las dedicatori­as de muerte que este hizo personalme­nte a algunos políticos; la libertad de poder expresarse es un derecho y desde este punto de vista, entraña también un deber, deber que nos hace responsabl­es y parte de nuestra educación, educación que se imparte en la escuela y la calle. Nuestro compromiso, no es un compromiso en singular, sino en plural, y debe caracteriz­arse por la ética social. Por tanto dicho esto, sería una razón más, para observar que la política solo puede ser a posteriori; los que se empeñan en definirla con esquemas apriorísti­cos, lo hacen como una forma peculiar, como un contraste de voluntades con una función objetiva ¿por qué correspond­er con la intención subjetiva en una acto de fuerza?, el efecto de un contrato social debe legitimars­e por un procedimie­nto racional. Por tanto, una sociedad sin libertad de expresion, es una sociedad amordazada; pero no debemos olvidar que también existe la libertad de pensamient­o, y esto implica pensar lo que se va a decir y me atrevería a decir que es prioritari­a a la libertad de expresion, de lo contrario nuestra sociedad seria intratable.

Nuestro compromiso, no es en singular, sino en plural, y debe caracteriz­arse por la ética social

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain