DIEZ AÑOS DEL 15-M
EL 15-M, del que se ha cumplido el décimo aniversario, se ha cerrado simbólicamente con el corte de coleta de Pablo Iglesias, hecho que ha llamado mucho la atención de la derecha. La de los indignados ha sido la última revolución juvenil de una larga serie que abarca el siglo XX y lo que va de este. Todas ellas fueron fallidas, si bien constituyeron revulsivos de la política y la sociedad de sus respectivas épocas. Y cada una de ellas tuvo asociado un género musical que la representaba.
Después de la Segunda Guerra Mundial fue la eclosión del rock, con Elvis Presley como estrella máxima. Su tupé y el de James Dean en el cine, marcaron tendencia, se dice ahora. En España fueron éxitos El rock de la cárcel, La plaga y todos los auambabulubabalambambú que emitía la radio. Pero en lo político, nada de nada. Acabó con la elección y asesinato de Kennedy.
Vino después la Década Prodigiosa. Comenzada con baladas románticas, continuó con los Beatles y los Rollings, f loreció en la cultura hippie –léase jipi–, que popularizó el primer eslogan pacifista contrario a la Guerra de Vietnam, aquel “Haz el amor, no la guerra”, y cristalizó finalmente en el Mayo francés del 68, verdadera revuelta política juvenil que pedía lo imposible porque era realista. Se extendió al Este de Europa con la Primavera de Praga, y en Estados Unidos se añadió al movimiento por los derechos civiles de Martin Luther King, que había sido asesinado en abril (en junio fue asesinado también Robert Kennedy).
A mediados de los 70 vino el movimiento Punk, que aún tiene sus defensores hoy en día, por lo menos en lo estético y lo musical. Fue consecuencia de la que se llamó Crisis del Petróleo del 73. Pero en España estábamos demasiado enfrascados en la incertidumbre creada con la muerte de Franco, el inicio de la Transición, la restauración borbónica, la Constitución, el Golpe de Estado de Tejero y la victoria del PSOE en el 82. En los 80, por cierto, fue la llamada Movida Madrileña –Mil calles llevan hacia ti, La chica de ayer…, ¿recuerdan?– y la eclosión de los movimientos sociales alternativos.
Los 90 fueron los años de la burbuja del ladrillo hasta que la crisis financiera de 2008 vino a aguar la fiesta del aznarato y Zapatero af lojó a los bancos 65.000 millones de euros. Aquí estuvo el inicio del 15-M que atronó las plazas y llegó al Gobierno. Y todo esto acaba con el corte de coleta de Pablo Iglesias.
El corte de coleta de Pablo Iglesias cierra toda una época de movimientos juveniles contemporáneos