Marruecos niega contactos con España y advierte del riesgo de ruptura de relaciones
El ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Naser Burita, afirmó ayer que “no hay ningún contacto con España desde el estallido de esta crisis actual”, causada por la entrada en suelo español en secreto del secretario general del Frente Polisario, Brahim Gali, para ser hospitalizado por covid-19 en un hospital de Logroño. Burita fue entrevistado por la emisora francesa Europe 1, y en sus palabras quiso desmentir explícitamente a la ministra española Arancha González-Laya, quien por la mañana dijo en los micrófonos de Radio Nacional de España que España y Marruecos mantienen conversaciones de manera discreta.
“Contrariamente a lo que dice la señora ministra –declaró Burita– no hay contactos desde el estallido de la crisis (a mediados de abril), y contrariamente a lo que dice, jamás fuimos informados sobre la llegada de ese individuo” a España. La ministra española afirmó “hay que mirar hacia el futuro y evitar que estas escenas se reproduzcan”, además de ayudar a retornar a los que quieren volver a ese país “y en ello estamos con las autoridades marroquíes”, porque “reconducir la relación es clave para los dos países”. Para ello, afirmó, mantienen muchas conversaciones de manera discreta.
Burita, por su parte hizo la distinción entre la Unión Europea y la mayoría de sus países, con los
que hay “muy buena relación” y “una actitud hostil de España” que ha creado, dice, esta crisis bilateral. “Hoy hay un problema de confianza y de respeto mutuo con España”, añadió, y advirtió, de forma más explícita que los días anteriores: “Le toca ahora España encontrar una solución: si opta por la salida (de Gali) de la misma manera que entró, es que busca el agravamiento de la crisis o incluso la ruptura”.
Las palabras de Burita a la emisora francesa se producen cuando habían pasado casi 24 horas de tranquilidad y de ausencia de declaraciones por parte marroquí.