El Burgos y el Ibiza de Carcedo y Soriano, a Segunda
La Unión Deportiva Ibiza, que comenzó hace seis años en Regional Preferente, y el Burgos, que regresa 19 años después, lograron ayer las dos últimas plazas de ascenso a Segunda División.
En 2015, el empresario valenciano y ex presidente del Valencia CF, Amadeo Salvo, se hizo cargo del equipo ibicenco, que desapareció en 2010 por deudas económicas. Saldó los 60.000 de deuda del club y recuperó el nombre: la Unión Deportiva Ibiza-Eivissa. Ese año, el equipo ibicenco comenzó su andadura en la Regional Preferente con Juan Ibáñez, Buti, como entrenador, y en la temporada 201617 consiguió clasificarse para la fase de ascenso a Tercera con el técnico alicantino David Porras.
El club celeste jugó en Tercera División durante la temporada 2017-18, y se clasificó para disputar el ascenso a Segunda B, al que accedió a pesar de perder en el play off por penaltis frente al Atlético Baleares, con Francisco Rufete como entrenador. El equipo ibicenco logró su puesto en Segunda B tras pagar 483.000 euros para ocupar la plaza vacante que había dejado el Lorca FC. De esta forma, la entidad celeste inauguró otra etapa, la de 2018-19, que tuvo como entrenadores a Antonio Méndez y, después, a Andrés Palop, hasta la llegada de Pablo Alfaro.
Con Alfaro el equipo alcanzó una posición de play of f para subir a Segunda División, pero fue eliminado por el Cornellà en julio de 2020, en una campaña afectada por la pandemia generada por el Covid 19, que obligó a suspender la Liga. El objetivo de subir a Segunda División, expresado en numerosas ocasiones por el presidente Amadeo Salvo, se cumplió ayer de la mano Juan Carlos Carcedo, que comenzó su trayectoria como primer entrenador con la UD Ibiza en agosto de 2020
El último equipo en lograr el ascenso a la Liga Smartbank fue el Burgos, al imponerse 10 al Athletic B en la segunda parte de la prórroga, con lo que vuelve a Segunda.