Los planes en el entorno de la Alcazaba prevén ahora más historia
● El Plenario aprueba el rediseño de la zona para preservar los restos arqueológicos
Ya recibió el visto bueno de la Comisión de Patrimonio de Cultura el pasado mes de noviembre, pero a los nuevos planes urbanísticos centrados en el entorno de la Alcazaba aún le quedaban la aprobación definitiva del Plenario. La Gerencia de Urbanismo ha obtenido los parabienes en forma de votos de la Corporación, a excepción de las abstenciones de Ciudadanos y Podemos a la modificación del PGOU de 1998, con la que el Ayuntamiento cambia las actuaciones por aquel entonces planteadas para sortear los restos arqueológicos encontrados en los últimos años junto a la Alcazaba y preservar también la trama urbana histórica de la zona de La Almedina y La Hoya. Son cambios significativos, ya que casas que llevaban todos estos años con su derribo programado escapan a la pala, mientras que otras viviendas se encuentran marcadas con el rojo municipal de expropiación.
De hecho, en el Pleno que el Ayuntamiento de Almería celebró ayer de nuevo de manera telemática –el sistema de ventilación no hace recomendable la concentración en el Salón Noble de más de diez personas–, la concejala de Urbanismo e Infraestructuras, Ana Martínez Labella, ha anunciado el inicio, la pasada semana, de los pasos dirigidos a la consecución del conjunto de viviendas que comprenden la manzana ubicada entre las calle Hércules y la calle Viña, incluyendo en esa gestión el inmueble situado al inicio de la calle Almanzor. Se trata de un edificio completo que será derribado.
Martínez Labella ha explicado que, una vez aprobado y entrado en vigor el presupuesto para este ejercicio, y siguiendo las instrucciones del alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, “se ha iniciado por parte de la Gerencia de Urbanismo el procedimiento para obtener la titularidad de las once viviendas unifamiliares que se encuentran en la citada manzana - otras cinco ya son propiedad municipal -, así como de siete propiedades del edificio que se encuentra en la esquina de la calle Hércules, hacia donde se volcaron todas las miradas cuando se procedió a las demoliciones de varios inmuebles de la calle Almanzor, poniendo aún más de manifiesto la necesidad de liberar ese espacio, en beneficio de una mejora visual de La Alcazaba desde ese punto”.
La edil ha apuntado que el objetivo municipal es tener “a la mayor brevedad posible la titularidad de todos esos inmuebles, proceder a su demolición, y redactar el proyecto que vendría a culminar la ambiciosa transformación de la que hasta ahora ha sido la cara más desconocida de la ciudad”. Al respecto, ha defen
Urbanismo inicia las negociaciones para lograr la titularidad de un edificio a demoler
dido la “sensibilidad” que el Ayuntamiento de Almería tendrá en el proceso de consecución de estos suelos respecto de sus actuales propietarios “como siempre se ha abordado por parte de esta administración”, ha recalcado frente a las peticiones, también recalcadas, realizadas desde la bancada socialista.
Aun siendo los del PSOE votos favorables a la modificación número 70 del PGOU, incluso con felicitaciones por la consecución de objetivos marcados desde 1998, el concejal Eusebio Villanueva receló del modus operandi municipal a la hora de conseguir la titularidad de las viviendas afectadas censurado el proceder “legal” pero “insensible” y falto de “empatía” que, en opinión del PSOE, el Ayuntamiento ha demostrado en el Barrio Alto. Enfatizando el arraigo de las familias a sus casas y a la zona antigua de la ciudad en las residen, ha pedido que, a través de la empresa municipal Almería XXI, se busquen “alternativas” que permitan a los afectados continuar residiendo en su barrio sin “repetir los errores de insensibilidad”, que el equipo de gobierno rebatió en el transcurso del debate al tiempo que rechazaba la postura de Ciudadanos por “inviable”.
El portavoz de la formación naranja, Miguel Cazorla, argumentó la abstención de su grupo al considerar más adecuado para las comunicaciones de la ciudad, desde la residencia Ballesol a la avenida del Mar, dando salida a El Quemadero, el planeamiento de la zona original contemplado en 1998. Inviable, según el PP, que en este aspecto fue respaldado por los criterios del PSOE, dado los restos arqueológicos hallados, como los de la calle Almanzor, y las indicaciones recibidas por la Delegación de Cultura para su conservación.